MENSAJE
DEL
PRESIDENTE DE LA REPUBLICA ARGENTINA
Hipólito Yrigoyen
AL ABRIR LAS SESIONES DEL CONGRESO NACIONAL
EN DE MAYO DE 1918
En la Ciudad de Buenos Aires, Capital Federal de la República Argentina
Buenos Aires, mayo 16 de 1918. [1]
Señores senadores, señores diputados:
A los graves problemas de todo orden a que se encontró avocado el actual gobierno, debía agregarse la situación política interna del país que reclamaba la acción reparadora de los altos poderes del Estado.
Solucionados aquellos problemas, el Poder Ejecutivo consideró como su primer deber dedicar su atención a la obra de restablecer el imperio de las instituciones y el afianzamiento de los principios democráticos, cumpliendo así el mandato que recibiera del pueblo de la Nación.
En las provincias [2], como en esta capital [3], sus habitantes gozan hoy de las más amplias garantías; y ante la firme resolución del gobierno de no permitir que se usurpe, defraude o menoscabe el derecho de sufragio, hacen saludable vida cívica, en la seguridad de que concurrirán a comicios libres y garantidos donde será respetada la voluntad popular.
Bajo estos auspicios acaba de efectuarse la renovación de la honorable Cámara de Diputados de la Nación; y se reorganizan en las provincias sus gobiernos. [4]
En poco tiempo más, no podrá, pues, dudarse de la legitimidad de los gobiernos, y después de larga y azarosa contienda por las libertades públicas, habremos restablecido definitivamente el imperio de la constitución.
Hacia esta conquista institucional que ha de influir poderosamente en los destinos del país, marchamos con paso firme, unidos en una común y noble aspiración, el pueblo y el gobierno.
El Poder Ejecutivo, colocándose a la altura del momento histórico en que le ha correspondido actuar, lleva su acción a las provincias para asegurar su autonomía, entregando a la soberanía del pueblo la decisión de sus destinos. [5]
En la oportunidad debida será informado el honorable congreso de las misiones federales enviadas a las provincias por el Poder Ejecutivo en uso de sus facultades, ejercitándolas siempre, con el pensamiento fijo en los altos y permanentes intereses de la Nación.
RELACIONES EXTERIORES
La labor del gobierno en este departamento ha sido intensa. A los graves conflictos, solucionados en la forma que es del dominio público [6], se agrega una acción activa relacionada con intereses múltiples de la vida económica del país que, comprometidos por la situación anormal que atraviesa, han sido salvados en su mayor parte mediante la gestión encomendada a nuestros representantes en el exterior.
Los problemas planteados por la guerra son de tal naturaleza que afectan fundamentalmente la vida de los estados y los principios que han sido considerados hasta hoy como sus deberes y derechos primordiales. La República Argentina aceptó desde el primer momento las consecuencias que, la ejecución de preceptos universalmente reconocidos, debía producir, y llegado el caso aplicó normas que constituyeron siempre el patrimonio común de la humanidad. Las reclamaciones, satisfechas, por el hundimiento del "Monte Protegido" y del "Toro", tuvieron así la solución que corresponde al imperio de esos principios. [7]
Otros problemas fueron originados por la extensión a América del conflicto europeo. Diversos países abandonaron su posición de neutrales ya rompiendo sus relaciones o declarando la guerra. Las contestaciones dadas, con tal motivo, por este gobierno a los comunicados de los Estados Unidos de América, Brasil, Uruguay y Perú [8], corroboran su concepto del mantenimiento integral de la soberanía de las naciones.
Varias han sido las iniciativas que surgieron de distintos países americanos a fin de aunar opiniones, frente a los problemas levantados por la conflagración universal; pero circunstancias diversas han impedido que ellas hubieran tenido el logro deseado. Sin embargo, las relaciones que la República Argentina ha mantenido con los distintos países se han desenvuelto dentro de la más amplia armonía. Con los Estados Unidos del Brasil tuvieron las más expresivas exteriorizaciones en los agasajos hechos al acorazado "Moreno", en la oportunidad de su visita a Río de Janeiro. La ratificación más evidente se halla en las instrucciones publicadas que aquel pueblo hermano diera a su Ministro en ésta.
Con la República Oriental del Uruguay [9], especialmente, es de recordar el mensaje que el excelentísimo señor Presidente Viera enviara a las cámaras con motivo de la promesa que el gobierno argentino pondría todo su concurso en defensa de la independencia de la Nación uruguaya, si ella fuera amenazada, asumiendo todas las responsabilidades consiguientes. Se exteriorizó en esta ocasión, de una manera acentuadísima, la solidaridad que liga a los pueblos del Plata. [10]
La Nación mejicana nos honró con el envío de una misión que puso de manifiesto la amistad que nos liga con aquella República, cuyo acercamiento en todas las actividades se expandirá cada vez más, con beneficio para ambos pueblos. [11]
Con motivo de la ascensión al mando del nuevo presidente de la República de Bolivia, excelentísimo señor Gutiérrez Guerra, envió este país una embajada especial [12] que, exteriorizando los fraternales vínculos, pudo al mismo tiempo apreciar durante su estadía en dicho país, la verdadera amistad que los pueblos de América mantienen entre sí, realizada en la práctica de estas misiones de acercamiento. La cuestión de límites pendientes es estudiada por este gobierno, así como la facilitación para construir el tramo de unión ferroviaria que por la Quiaca ha de unirnos con las redes bolivianas, y la de la línea que debe correr de Embarcación a Yacuiba.
Invitada esa embajada por el gobierno del Perú, tuvo ocasión, durante su visita, de apreciar en los afectuosos agasajos, la tradicional amistad que nos une con ese pueblo hermano.
Los nuevos aspectos que la actual perturbación del mundo da a las relaciones del comercio exterior, determinaron al gobierno a confiar a nuestro embajador en Washington, el cargo de "Alto comisionado financiero en los Estados Unidos de América", entendiendo con esta designación facilitar sus gestiones y salvar en lo posible las dificultades creadas al intercambio.
Respondiendo a una alta invitación del gobierno de Chile, fue enviada la misión especial que se asoció, en representación de nuestro país, a los festejos con que fuera allí conmemorado el centenario de Maipú. [13] Difícil es traducir en forma más elocuente la amistad sincera entre estos dos países, que la exteriorizada con motivo de aquellas celebraciones, e imposible superar la gentileza de aquel pueblo y de aquel gobierno en las manifestaciones a nuestro país. Cúmpleme al dar cuenta a vuestra honorabilidad dejar constancia de estos homenajes que tanto nos obligan como nos honran.
El aniversario de la independencia de la República del Paraguay [14], ha dado ocasión para que la Argentina, con el envío de una misión especial, pueda asociarse a los festejos, reiterando una vez más la sincera vinculación que nos une.
El nuevo presupuesto presentado por el Poder Ejecutivo y sancionado por vosotros, ha creado legaciones separadas para cada país de América, solución que contribuirá al más estrecho acercamiento con las naciones del continente americano.
Se ha reconocido, durante el transcurso del año, al nuevo gobierno de Rusia [15] y de la República de Finlandia. El gobierno de Costa Rica fue asimismo reconocido sin dilación alguna.
Es firme prop6sito de este gobierno dar facilidades de todo orden a la comunicación económica con los países de América, convencido de que una amplia idea de intercambio servirá más al recíproco crecimiento de estas naciones, que las cortapisas creadas por un estrecho concepto de las conveniencias.
La situación de la República Argentina, en paz y amistad con todos los países del mundo, queda así bien y enteramente definida, sin motivo actual para abandonar la actitud que ha asumido frente a la conflagración europea. Este gobierno creyó que la República debía, en todo momento, asumir las responsabilidades propias de su caracterizaci6n, y ha sido terminante en los juicios emitidos con motivo de las distintas incidencias en que debía opinar, y absoluto en las reclamaciones que directamente le correspondieron, siendo en un todo respetado en la emisión de aquellos juicios y totalmente satisfecho en las reclamaciones que planteara.
CULTO
La Iglesia argentina ejerce en forma normal por intermedio de los dignos prelados que la representan la elevada misión de orden social que, dentro del Estado, está llamada a desempeñar.
BENEFICENCIA
Los asilos, hospitales y colegios de beneficencia subvencionados por el Estado -para fines de asistencia social- funcionan regularmente y reciben albergue y educaci6n gran cantidad de niños, pudiendo establecerse que, por el severo contralor implantado, las partidas a que ellos -se dedican son realmente aplicadas a un importante servicio prestado a la sociedad.
En lo que se refiere a la Sociedad de Beneficencia de la Capital, su conocida acci6n se desenvuelve dentro de un perfecto espíritu de progreso, como lo comprueban los beneficios que reciben las clases desvalidas en los establecimientos de beneficencia pública que de ella dependen, y, dentro de este concepto, cúmplele al Poder Ejecutivo dejar constancia de la actuaci6n de las distinguidas damas que la dirigen, caracterizada por una laboriosidad y diligencia encomiables en el desempeño de los nobles fines de la caridad.
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La obra de los hospitales regionales continúa desenvolviéndose dentro de los recursos que acuerda la ley 4953, encontrándose muy adelantadas las construcciones de los hospitales para enfermos de dolencias comunes en La Rioja y en el Territorio de Río Negro, en Allen. El hospital común en Bell Ville y el asilo colonia de niños abandonados, en Olivera, se han terminado en estos últimos meses y podrán librarse al servicio en el transcurso del corriente año.
Interesado el gobierno en solucionar el problema que se relaciona con la tuberculosis, sometió oportunamente a la consideración de vuestra honorabilidad un proyecto de ley [16] solicitando los recursos necesarios para el establecimiento de sanatorios e instituciones de previsión que respondan a las exigencias que el país reclama frente a este mal, que tanto daña el presente comprometiendo el porvenir. El gobierno no omitirá esfuerzo para combatirlo incesantemente.
Así, dentro de los elementos de que dispone, ha apresurado la terminación de la obra del Sanatorio Nacional de Tuberculosos, en Santa María, que, concluido ya en la fecha y casi definitivamente instalado, podrá ser habilitado al servicio público en el próximo mes de junio, como asimismo ha establecido en esta capital un dispensario antituberculoso destinado a la clasificación y distribución apropiada de esos enfermos en los distintos hospitales. [17]
HACIENDA
Es en esta rama de la administración pública donde la tarea ha sido más ardua y delicada para mantener el buen nombre de la Nación.
Ya en otra oportunidad el Poder Ejecutivo ha manifestado a vuestra honorabilidad cuán lamentable era el estado de las finanzas al iniciarse el actual gobierno. [18]
No obstante los mayores esfuerzos realizados para liquidar una situación tan precaria, sólo pudo obtenerse la cancelación de los préstamos en los Estados Unidos con recursos obtenidos en el país.
Como sin la ley respectiva el Poder Ejecutivo no podía consolidar las deudas a corto plazo, que tanto pesan sobre el tesoro, ha debido concretarse a prorrogar las obligaciones a su vencimiento, confiando que en el período legislativo que se inaugura hoy habrá de prestarse preferente atención a un asunto de tan vital importancia. [19]
El presupuesto de 1917 autorizó gastos por $ 393.024.807 que como los recursos asignados sólo han producido en conjunto $ 252.305.632 resulta un déficit de $ 140.719.175, que se eleva a $ 190.000.000, adicionando a esta cifra el monto de la deuda exigible que pasó del año anterior.
Se han hecho economías en los gastos por $ 46.536.000.
Para cubrir el déficit mencionado fue ineludiblemente necesario contraer nuevas deudas, procediendo el Poder Ejecutivo con la mayor prudencia en tal sentido, pues la cifra de los préstamos a corto plazo sólo ha aumentado en $ 64.520.000 en 1917.
El resultado del ejercicio de que os doy cuenta, se debe al hecho de que el presupuesto fue proyectado y sancionado con todas las deficiencias de los anteriores.
No se dejará, sin embargo, de continuar realizando economías y mejorando el cálculo de recursos, hasta llegar a obtener que las erogaciones fiscales no excedan de las entradas ordinarias del tesoro, para iniciar la amortización de la deuda pública, que es uno de los propósitos más firmes del Poder Ejecutivo. [20]
DEUDA PÚBLICA CONSOLIDADA
Los títulos de deuda pública consolidada, inscriptos durante el año, representan un valor nominal de $ 135.007.236,36 y los amortizados, pesos 23.891.716,72, ascendiendo la circulación de esa deuda al 31 de diciembre de 1917 a $ 1.353.815.302,11. Si de esta suma se deduce el valor de los títulos que tiene el gobierno en su poder, resulta que la deuda efectiva se limita a $ 1.244.248.911,20.
CIRCULACIÓN FIDUCIARIA
El movimiento de las operaciones bancarias ha seguido en aumento. Los últimos balances arrojan las siguientes cifras:
COMERCIO INTERNACIONAL
Me es grato anunciaros que el intercambio comercial argentino en 1917 ha dejado un saldo favorable al país de pesos oro 169.848.871.
Las importaciones ascendieron a pesos oro 380.321.178 y las exportaciones a pesos oro 550.170.049.
Las cifras del primer trimestre del corriente año comparadas con las de igual período del año anterior arrojan disminución en las importaciones y un aumento apreciable en las exportaciones. [22]
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En breve se presentará a vuestra honorabilidad el proyecto de presupuesto para el año próximo.
JUSTICIA E INSTRUCCIÓN PÚBLICA
La tarea de reconstrucción de la vida administrativa en este vasto departamento de gobierno se ha continuado con la misma eficiencia y celo de los días iniciales.
El Poder Ejecutivo considera que es condición indispensable de un buen servicio público, el orden, la exactitud y la rapidez en el trámite, distribución y despacho de los distintos asuntos, que deben atenderse, pues son igualmente respetables los intereses afectados, cualquiera que sea su importancia.
JUSTICIA
Tener una buena justicia, en el más alto significado del concepto, es el ideal a que debemos aspirar.
Para la realización de tan nobilísimos propósitos se requiere, ante todo, que el desempeño de la magistratura, desde la más modesta de menor cuantía hasta la más elevada, se encuentre en manos calificadas de indiscutible e insospechada moralidad, fuera de la versación jurídica inherente a la naturaleza misma de esas delicadas funciones.
Si la idoneidad y la hombría de bien son cualidades distintivas de todo funcionario público, es esencial, además, en los llamados a administrar justicia, la austeridad en las costumbres y las más severas y rígidas reglas de conducta en la vida pública y privada.
Convencido el Poder Ejecutivo de la verdad de esos enunciados, ha de propender, en todo momento, a la dignificación de la judicatura argentina, de tal manera que mantenga siempre incólumes la integridad y el decoro de su investidura.
La reforma de la legislación, principalmente en lo que se refiere al Código Penal, ley carcelaria, Justicia de Paz, ley de quiebras y leyes procesales, demanda una atención preferente, no sólo porque es urgentemente reclamada por las crecientes y múltiples necesidades de la nación, sino porque así lo exigen la civilización alcanzada por el país y los adelantos científicos de la época.
De todo ello se preocupa el Poder Ejecutivo y ha de procurar que esa reforma se realice a la mayor brevedad, presentando los respectivos proyectos de ley y cooperando, asimismo, en el estudio y sanción de los que estén o sean sometidos a la consideración de vuestra honorabilidad.
INSTRUCCIÓN PÚBLICA
La difusión de la cultura nacional en sus diferentes formas constituye para el Poder Ejecutivo una de sus mayores preocupaciones en la gestión gubernativa.
Todos los actos hasta ahora realizados en este sentido, referentes a la instrucción pública, han concurrido a la consecución de esos superiores designios.
Resolver los problemas de la educación es fundamental para la vida y progreso institucional de la República, principalmente el de la educación primaria, como esencia y bien supremo de la democracia.
Las escuelas primarias autorizadas por una partida especial del presupuesto del año próximo pasado, tendiente a combatir el analfabetismo en el país, han sido ya instaladas en su gran mayoría, tanto en la capital como en las provincias y territorios, venciendo los grandes inconvenientes con que se tropieza, particularmente en las campañas, a causa de la diseminación de la población escolar y de la falta de locales apropiados.
El Poder Ejecutivo estudia la mejor forma de propagar las primeras nociones de la cultura elemental a fin de reducir en breve tiempo la enorme cifra de niños que no saben leer ni escribir. [23]
Aplicadas con eficacia y permanentemente las medidas que para tales objetivos se proyectan, participarán de sus beneficios hasta las poblaciones más apartadas y los peligros del analfabetismo habrán quedado reducidos a su mínima expresión.
El Poder Ejecutivo se ha impuesto también como un deber impostergable el de orientar las instituciones docentes de la instrucción secundaria y normal, dentro del alto concepto moral que debe caracterizar la enseñanza nacional, a fin de que llenen eficientemente la noble misión que se les ha confiado.
Los establecimientos de educación deben estar rodeados de legítimos prestigios adquiridos por la inteligencia y austera actuación de sus directores, por la efectiva colaboración de profesores y maestros que, con sus probidades, sus conocimientos y sus consagraciones derramen todo el inmenso bien de que ha menester la juventud argentina para forjar su carácter y modelar su espíritu en virtudes ejemplares, deparando así a la patria un grandioso porvenir.
El régimen universitario necesita asimismo modificar su ambiente en cuanto a los métodos de gobierno, administración y enseñanza predominantes, rompiendo los viejos moldes a efecto de evitar la concentración en pocas manos, y sin solución de continuidad, del manejo de los respetables intereses encomendados a esas instituciones, dando intervención en la elección de sus autoridades directivas y cuerpos docentes a todos los elementos constitutivos de las diferentes facultades que las componen. [24]
En las primeras sesiones del período legislativo que se inaugura, el Poder Ejecutivo presentará a la consideración de vuestra honorabilidad el proyecto de ley orgánica de la instrucción pública en sus distintas categorías, en la que se establecerán los planes adecuados y uniformes que fijen normas permanentes de la enseñanza en el país y se asegure al mismo tiempo la estabilidad del profesorado, su equitativa remuneración y un retiro honorable. [25]
GUERRA
El año próximo pasado, en esta misma ocasión, anuncié que el Poder Ejecutivo sometería a vuestra consideración un proyecto destinado a dar al Ejército una nueva ley orgánica.
La necesidad de incorporar a la nueva ley las prescripciones consagradas por las legislaciones militares más modernas y las sugeridas por la práctica de las que actual y anteriormente estuvieron en uso, ha demostrado la conveniencia de someter el anteproyecto presentado por la comisión militar nombrada al efecto, al estudio de miembros caracterizados del Ejército. En esa forma, se puede asegurar desde ya que el proyecto definitivo contará con su aprobación, lo que contribuirá a darle estabilidad, condición indispensable a toda ley que deba regir la organización de las fuerzas militares de la nación.
Espero poder someteros el proyecto definitivo, en el transcurso de las sesiones ordinarias que hoy se inician.
En el primer mensaje, el Poder Ejecutivo tuvo oportunidad también de manifestaros el propósito de completar la organización del Ejército, creando en tiempo de paz los núcleos que han de servir de base a la formación de todas las unidades previstas para el caso de una movilización.
Se ha comenzado por reorganizar la caballería, por ser una de las armas más difíciles de improvisar.
Han sido creados los regimientos 10, 11 y 12 de caballería, un grupo de artillería a caballo y dos escuadrones de ametralladoras. Además, un regimiento de gendarmería a dos escuadrones, el que seguirá efectuando el servicio de vigilancia y policía en los territorios de Formosa y el Chaco, hasta hoya cargo de los cuerpos de caballería del Ejército.
Con los doce regimientos, se han constituido seis brigadas, las que tendrán su asiento definitivo en la Capital Federal, Zapala, Concordia, San Rafael, Salta y Paso de los Libres.
El pasaje a la nueva organización no ha irrogado ningún gasto que signifique un aumento a los expresamente autorizados por la ley de presupuesto.
El número de escuadrones tampoco ha sido aumentado, pero como el desiderátum sería crear el pie de paz reforzado para todas las formaciones de la caballería de ejército y divisionaria, habrá necesidad de hacerlo a medida que las circunstancias lo permitan, por la simple creación de las formaciones que hoy faltan.
Se han introducido, además, modificaciones a la planta orgánica del Ejército. Estas modificaciones, en sus lineamientos principales, son las siguientes:
1° Han sido disueltas las brigadas de ingenieros y se han formado, en cambio, comandos de esa arma, anexos al de cada división del ejército, como órganos técnicos asesores de los mismos.2° Se han creado cinco secciones de tren de puente, las cuales han sido afectadas a los batallones de zapadores pontoneros, existentes en cada región.3° Han sido numeradas y afectadas a los batallones antes mencionados, las cinco compañías de telegrafistas.
El Estado Mayor ha estudiado con criterio de aplicación positiva, cuestiones que interesan a la movilización del Ejército, habiéndose con este concepto modificado algunas de las normas y reglamentaciones que regían.
Tanto el Estado Mayor del Ejército como los Estados Mayores de División, han practicado sus viajes de estudio, cuyo interés se ha puesto de manifiesto por los mismos resultados alcanzados en la apreciación real sobre el terreno de los diversos temas propuestos.
Ha reglamentado la ley 9697, de estadística militar, votada por vuestra honorabilidad el año 1915.
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El material de artillería de que hoy dispone nuestro Ejército deberá ser completado. Razones de orden táctico y orgánico señalan la conveniencia de asignar a las brigadas de artillería un grupo de obuses de campaña de 10,5 cm de calibre.
Además, habrá que adquirir el material de artillería pesada de montaña, indispensable para nuestras necesidades, e instalar, cuanto antes, las fábricas de pólvora y de proyectiles.
Los gastos que demande la adquisición de estos elementos os serán solicitados en su debida oportunidad.
La Dirección General de Arsenales, de acuerdo con la orientación que ya tuve oportunidad de señalar, continúa buscando la forma de independizarnos de la industria extranjera, tratando de utilizar en la confección de las armas y efectos militares que le están encomendados, materiales del país.
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Continúa siendo un problema, a pesar de las leyes dictadas por vuestra honorabilidad, el mejoramiento de las viviendas destinadas al alojamiento de nuestros soldados. No todas las unidades cuentan con alojamiento propio, y algunas de ellas se encuentran alojadas en locales que no reúnen todas las condiciones higiénicas exigidas para el alojamiento de grandes agrupaciones. Compenetrado de esta necesidad, el ministerio del ramo prepara un programa completo de construcciones, el que, en su debida oportunidad, será remitido a vuestra honorabilidad y realizado a medida que la situación económica del país lo permita. Por lo pronto y hasta tanto se realice el pensamiento apuntado, se piensa incorporar en el proyecto de presupuesto para 1919 una partida de un millón quinientos mil pesos, destinada a la construcción de dos cuarteles de infantería en la Capital Federal y a la iniciación del nuevo edificio para el colegio militar.
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La orientación táctica y la aptitud para la conducción de las tropas en campaña, de los oficiales del Ejército, han sido comprobadas por medio de ejercicios tácticos a caballo, de batallón, grupo, regimiento, brigada y división, realizados durante un período de quince días en cada una de las divisiones del Ejército.
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A pesar de las dificultades de diversa índole con que se tropieza para poseer una escuadrilla aérea que responda a nuestras necesidades, es satisfactorio poder consignar que la aviación militar ha realizado notables progresos.
La escuela militar de aviación se encuentra en condiciones de construir ya sus aparatos y con la compra de motores que acaba de efectuarse en Europa podemos contar con tener el año próximo venidero, una escuadrilla más moderna y mucho más numerosa.
Sin embargo, habrá que destinar mayores sumas a este fin, para no quedar retrasados, dado el continuo progreso que esta nueva arma realiza.
La disciplina de las tropas ha sido sometida a prueba durante las últimas huelgas ferroviarias. No se registra un solo caso, entre el numeroso personal que en ellas le tocó intervenir individual o colectivamente, que signifique una transgresión a la consigna especialmente impartida de hacer respetar la propiedad pública o privada y garantizar la libertad individual y de trabajo.
En las intervenciones en que les tocó actuar, fueron también la mejor garantía de orden y el más seguro y eficaz amparo para todos los derechos ciudadanos.
El Ejército continúa gradualmente y de acuerdo con las necesidades y recursos del país, su evolución hacia el perfeccionamiento.
Sin duda, que el adelanto sería aun más notable si circunstancias por todos conocidas y que ejercen su influencia sobre la economía nacional, no obligaran a restringir los gastos de la administración y a dejar, en consecuencia, para épocas más propicias, la ejecución de muchos proyectos que interesan especialmente a la defensa nacional.
MARINA
El Poder Ejecutivo ha prestado toda la atención debida a la Armada y a los diferentes servicios con ella relacionados. Como una consecuencia de los propósitos que lo animan sobre este asunto, puedo anunciaros que en las primeras sesiones del actual período, se presentará a la consideración de vuestra honorabilidad un proyecto de ley solicitando la autorización y los medios necesarios para completar el material flotante de la escuadra con los elementos que le son indispensables, dotar a sus arsenales de los talleres, maquinaria, etcétera, que le permitan llenar debidamente sus funciones y, finalmente, crear en nuestra extensa costa sus apostaderos con los recursos que la Escuadra necesita, toda vez que deba actuar en el Atlántico, ya sea en el desempeño de su misión en tiempo de paz, como también en las operaciones que, en ejercicios u otra circunstancia, le tocara desarrollar.
También será sometido al estudio y aprobación de vuestra honorabilidad un proyecto de ley orgánica para la Armada [26], él ha sido confeccionado por un grupo de jefes, quienes por sus respectivos grados, especialidades y hasta edades, representaban las distintas tendencias en que puede dividirse la opinión general de la marina; se trata, pues, de un estudio concienzudo que ha sido después sometido al criterio de todo el personal de la Armada, recogiendo y aprovechando todas aquellas observaciones que el referido proyecto ha merecido.
Me es satisfactorio llevar a conocimiento de vuestra honorabilidad la conducta digna de elogio observada por el personal de la Armada, con motivo de los últimos movimientos obreros; en estas circunstancias se ha puesto en evidencia su alto nivel de disciplina, aumentando los prestigios que tiene conquistados en la opinión del país. Los conflictos nacidos en Comodoro Rivadavia, entre el personal superior de la explotación de los yacimientos petrolíferos y los operarios, hicieron aconsejable un cambio en su dirección, a consecuencia del cual ésta se encuentra hoy confiada a oficiales de marina. [27]
El Departamento de Marina ha facilitado al de Agricultura un grupo de jefes encargados de llevar a la práctica las inspecciones y demás medidas indicadas por la intervención en la administración de tierras y colonias; la conducta de estos jefes ha justificado ampliamente la honrosa comisión que se les confiara.
Vuestra honorabilidad queda sí Informada de que aparte de las funciones que le son propias, la marina ha contribuido con toda eficacia, siempre que un interés de orden público ha solicitado su concurso.
Persiste cada día con mayor intensidad la escasez de bodegas y por consecuencia la carestía de los fletes. Preocupado el gobierno desde el primer día, en la solución de este importante problema, ha resuelto transformar en buques de carga todos aquellos que por su edad o valor militar anticuado, han sido radiados de la escuadra. Se tropieza, en las obras que actualmente se llevan a cabo, con el serio inconveniente de la escasez de material de acero necesario para estas modificaciones. A pesar de todas estas dificultades, el Poder Ejecutivo espera que en breve queden convertidos en buques de carga, los cascos del "Patagonia", y "Tiempo", buques que así transformados, aportarán un elemento importantísimo al desarrollo del comercio y de las poblaciones de la Patagonia y Tierra del Fuego.
También se ha dispuesto la transformación en transportes de dos dragas del Ministerio de Obras Públicas; esta medida se ha tomado teniendo en cuenta que las referidas embarcaciones no prestan servicios en la actualidad.
Con el propósito de facilitar la salida de nuestros productos y la importación de aquellos que son necesarios al país, por lo menos a los diversos departamentos de la administración, se viene desde tiempo atrás gestionando la adquisición de buques mercantes, para incorporarlos a los pocos transportes con que cuenta la Armada en la actualidad. Aunque no se ha dejado pasar una sola oportunidad para estas gestiones, ellas no habían arribado a algo práctico, hasta que, recientemente, se obtuvo la adquisición del vapor alemán "Babia Blanca" [28], en condiciones excepcionalmente ventajosas. La importancia de esta negociación pueda apreciarse por el hecho de que la capacidad de carga del buque referido es superior a la de los tres transportes mayores con que cuenta la marina. El Poder Ejecutivo espera poder adquirir otros buques, convencido de que es éste el medio más económico y práctico para contribuir a la solución de la honda crisis de transportes marítimos por que se atraviesa.
Por las razones que más arriba se mencionan, las actividades profesionales de la Escuadra han sido un tanto limitadas; para el año corriente se ha preparado un plan amplio de ejercicios de navegación, al cual se dará cumplimiento; el ministerio respectivo se ha preocupado con todo interés de reorganizar las escuelas del personal subalterno, creando la preparatoria en Martín García de la cual se esperan muy buenos resultados. La escuela de aplicación para oficiales ha iniciado una nueva época, con nuevos programas y con nuevas ideas, cuyo desarrollo se ha puesto bajo una hábil dirección; en cuanto a la Escuela Naval, el Poder Ejecutivo espera que en el caso de las actuales sesiones vuestra honorabilidad sancionará la ley por la cual se autoriza a construir el edificio, sin el que no es posible una organización lógica en sus servicios. [29]
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Finalmente, el Poder Ejecutivo entiende que es deber primordial dedicar preferente atención a todo aquello que se relaciona con la Marina de Guerra. El momento actual es de expectativa, en lo que se refiere a la importancia relativa que en el futuro debe darse a los diversos elementos que la constituyen; los nuevos métodos de guerra, las nuevas unidades que desempeñan el rol más importante en las actuales operaciones, y muchas otras circunstancias, que sólo la experiencia hará apreciar, se pondrán de manifiesto en su justo valor una vez terminada la conflagración europea; pero, cualquiera sea el criterio con que se analicen los hechos, se llegará a la conclusión de que los destinos de los países radican, sobre todo, en la libre navegación de los mares, y que nuestra Escuadra debe acrecentarse en la misma proporción que nuestra Marina Mercante Nacional. [30]
AGRICULTURA
Una de las medidas de este gobierno fue, como sabe vuestra honorabilidad, aclarar la situación de los propietarios y ocupantes de tierras fiscales a fin de organizar debidamente ese factor trascendental de progreso de la República. [31]
Era necesario rever las concesiones de tierras para anular las que hubiesen sido ilegalmente obtenidas; y suman ya más de tres millones de hectáreas las que han sido así motivo de revisión.
De una buena organización de esas extensísimas regiones, abandonadas a sí mismas durante tantos años, depende su progreso y enriquecimiento. Con ese propósito social, y a pesar de las oposiciones de que fuera objeto, el gobierno ha realizado y continúa una obra de saneamiento cuyas inmensas ventajas se han de reconocer en un porvenir cercano. Y no se ha limitado a corregir vicios antiguos; el Poder Ejecutivo ha enviado comisiones investigadoras a fin de examinar la situación de los ocupantes de tierras fiscales, llevando instrucciones para estudiar las condiciones agronómicas de fa región, indicar las mensuras pertinentes a la ocupación, percepción de las rentas y valores adeudados al Estado; lo que equivale a levantar su catastro y a hacer un balance de la tierra fiscal desconocida hasta ahora por los poderes públicos.
Persíguese el fin de preparar y abrir los territorios a las nuevas corrientes de población, incorporándolos en forma legal al trabajo y a la civilización del país; y ese pensamiento ha de ser una de las preocupaciones preferentes del gobierno por la gran significación que le atribuye como factor del progreso nacional. [32]
Dentro de esa corriente de ideas, el Poder Ejecutivo, deseoso de colocar a los territorios bajo el contralor científico inmediato del gobierno en su doble aspecto agropecuario e industrial, creó en el presupuesto de este año las oficinas regionales de tierras. Colocadas en cada uno de los territorios, se encontrarán en contacto directo con el poblador y en buenas condiciones para percibir las rentas fiscales, vigilar los concesionarios, proporcionar elementos de información y de trabajo a los pobladores y asesorarlos en la elección de los procedimientos de cultivo apropiados a la región. Éstos podrán, así, seguir ellos mismos los trámites de sus concesiones, y velar por sus intereses ante el gobierno, sin necesidad de intermediarios.
La inspección y el cuidado de los bosques serán a su vez mejor atendidos. El Poder Ejecutivo ha mandado efectuar inspecciones y dictará en breve decretos sobre este punto, evitando en forma práctica la destrucción; medida más necesaria que nunca en estos momentos en que la producción forestal ha aumentado de 1.761.106 toneladas en 1912 a 4.580.460 toneladas en 1916.
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El estado de nuestra agricultura es satisfactorio así por la calidad de los granos como por el aumento de la cosecha que ha sido la mayor registrada en nuestros anales. [33] La propaganda del gobierno para el sembrado en vasta extensión y el préstamo de catorce millones de pesos de semillas de buena calidad a más de veinte mil colonos, reingresados ya en buena parte, ha contribuido indudablemente a este resultado. Y la defensa contra la langosta, realizada en forma preventiva, durante los meses de invierno en las regiones del norte, ha coadyuvado a la producción conteniendo y debilitando las invasiones del acridio.
Para la exportación de la cosecha, el gobierno se preocupó del envase, e hizo con éxito reiteradas gestiones en el extranjero. Esto no obstante, el artículo subió de precio, perjudicando al productor, debido en gran parte a la negativa de sancionar el proyecto del Poder Ejecutivo en el cual se pedía la requisa de la arpillera y bolsas en el país. [34] El gobierno fomenta la explotación de textiles indígenas, y se entrevé la posibilidad de alcanzar un resultado satisfactorio con un producto nacional que reemplace al artículo extranjero.
El Poder Ejecutivo persiguiendo su acción tutelar no se limitó a aconsejar el sembrado y a proteger la producción; trató con las potencias compradoras de cereales y llegó con ellas al convenio altamente favorable que vuestra honorabilidad conoce. Es digno de observarse que ésta es la primera vez que el gobierno argentino toma sobre sí la defensa y la colocación de la producción nacional, zanjando dificultades y perjuicios que los intereses particulares no habrían podido evitar librados a sí mismos. [35]
Esta acción gubernativa no es un fenómeno aislado, ni responde a la simple incitación del momento. Antes bien, es previsión y cálculo del porvenir y defensa del productor y del industrial, uno de los puntos capitales del programa de este gobierno que cifra en la actividad fabril la independencia económica que el país anhela conquistar.
En ese sentido ha abierto mercados en el exterior con exposiciones de productos, como lo ha hecho en el Brasil y lo proyecta en el Paraguay, mandando comisionados para estudiar las plazas comerciales, realizando exposiciones internas y facilitando a los productores medios de transportes.
La situación mundial de las industrias es fecunda en enseñanzas y la legislación vigente debe modificarse. Al efecto el gobierno tiene a estudio un proyecto de ley de fomento industrial que tiende a alentar al comerciante en sus esfuerzos y facilitar el desenvolvimiento de sus actividades; pero entretanto la gestión del Poder Ejecutivo se ha encaminado a evitar al industrial los inconvenientes surgidos de las medidas prohibitivas de los países en guerra, mediando con todos los elementos a su alcance para obtener concesiones favorables.
Consecuente con este orden de ideas, queriendo fomentar las industrias agropecuarias y adelantándose a la necesidad de preparar adecuadamente al país para las corrientes inmigratorias que han de seguir llegando después de la guerra, el Poder Ejecutivo presentó el año pasado un proyecto de colonización agrícola-ganadera cuya ventaja principal consistía en favorecer a los pequeños capitalistas con la ayuda inicial del Estado. El proyecto no llegó a tratarse por no haberse sancionado el empréstito de donde debían provenir los fondos necesarios, pero el gobierno insistirá en la realización de esa idea que considera fundamental para el desarrollo de las pequeñas industrias agropecuarias, y acompañará un proyecto financiero que le servirá de base. Ha fomentado igualmente la caza y la pesca marítima, derogando la prohibición que existía desde el año 1880. Para alcanzar el arraigo de las poblaciones pesqueras, y para que las empresas arriesguen sus capitales con seguridad de estabilidad en sus concesiones, el gobierno ha presentado a vuestra honorabilidad una ley nueva de cuya sanción espera grandes beneficios. [36]
La industria petrolífera ha recibido toda la intensificación posible, conciliable con el estado actual de la fabricación de maquinaria y los fletes que dificultan el transporte de elementos con que pudiera aumentar los pozos y la producción. Asimismo la exportación ha sido incesante; se han explotado treinta y nueve pozos contra veintidós en 1916 con un resultado de 182.000 toneladas en 1917 contra 131.000 en 1916 [37], y el Poder Ejecutivo ante las exigencias de las industrias del país, nacidas a raíz de la imposibilidad de obtener combustible en el exterior, juzgó indispensable aumentar en toda forma la producción. Al efecto, no sólo intensificó la explotación, sino que contrató con la compañía argentina de Comodoro Rivadavia la compra del producido de sus pozos. Esta adquisición tenía además el propósito de dirigir la distribución del combustible, circunscribiendo la entrega al consumo necesario y reproductivo y haciendo así del reparto nuevo una verdadera protección a las industrias contra las vicisitudes del momento. La falta de petróleo extranjero, ha traído mayor demanda y mejores precios. Lo mismo ocurre con las demás industrias mineras. La escasez de ciertas materias primas y el precio elevado de los metales repercutirá más adelante con provecho en el desarrollo económico de la República, pues la necesidad de bastarnos ha tenido como consecuencia la entrada en valor de numerosos yacimientos que anteriormente habían sido desdeñados por la facilidad con que se recibían los mismos productos del extranjero.
El año transcurrido ha sido bueno para la ganadería. Las faenas de bovinos para exportación han alcanzado en 1917, a 2.940.394 cabezas contra 2.100.000 en 1916. Las perspectivas son halagüeñas y debemos prepararnos para aprovechar las ventajas de nuestra posición en el comercio de carnes.
E! gobierno ha prestado al problema de la enseñanza agrícola preferente atención dada la importancia que reviste en un país como el nuestro donde la masa agrícola de variados orígenes carece con frecuencia de cultura técnica, de conocimiento del suelo y de condiciones para interpretar en la práctica los factores económicos y naturales.
OBRAS PÚBLICAS
Las dificultades enunciadas en el mensaje inaugural de vuestras sesiones en el período de 1917 que ya obstaban en aquel momento para la continuación de los trabajos públicos, dentro del plan de su iniciación con arreglo a los respectivos contratos, se han acentuado en forma tal que las obras en ejecución han debido reducirse a su mínimum, en razón del creciente encarecimiento de los materiales que deben importarse cuando no, para alguno de ellos, su falta absoluta en plaza. Dado ese antecedente paso a explicaros en forma sucinta los trabajos del año y los resultados inmediatos que algunos de ellos han de producir, como elementos concurrentes al mejoramiento de las condiciones económicas en que el país desenvuelve su acción.
Ferrocarriles. - La explotación ferroviaria ha sido afectada durante el año 1917, y lo seguirá siendo hasta la terminación de la guerra por el aumento de todos los gastos, incluyendo en ellos el de los salarios impuestos por el encarecimiento de la vida, y por las condiciones precarias en que se desenvolvía el trabajo del personal ferroviario debido al poco empeño que las empresas habían puesto en mejorar su situación, antes de producirse la huelga de setiembre próximo pasado. [38]
Ese movimiento de reivindicación obrera justificado en sus causas determinantes, y del que sólo deben condenarse los excesos lamentables en que incurrieron los obreros dañando los intereses de algunas empresas, que si no pudieron prevenirse fueron debidamente reprimidos por el Poder Ejecutivo, ha tenido como una e sus principales consecuencias el aumento del 10 por ciento sobre todos los salarios y sueldos: hasta 300 pesos moneda nacional, y las reglamentaciones dictadas en ejercicio de las facultades que acuerda al Poder Ejecutivo la ley general de ferrocarriles [39], consultando en lo posible las peculiaridades del trabajo de los ferroviarios, sobre la base de la jornada de 8 horas de, trabajo efectivo.
El principal aumento en los gastos de explotación se debe al encarecimiento del combustible y demás artículos de importación indispensables al servicio ferroviario, y agregado a esa causa el reducido aumento de salarios a que se ha hecho referencia, queda explicada la aceptación por parte del Poder Ejecutivo de un aumento del 22 por ciento en las tarifas con carácter provisorio hasta tanto desaparezcan las causas extraordinarias que autorizaron esa medida derivada, como queda dicho, de la guerra europea. En ese concepto el Poder Ejecutivo entiende que en uso de facultades indeclinables, y dentro del mayor respeto de los derechos acordados a las empresas por las leyes de concesión, debe en oportunidad hacer una prolija revisión de ese aumento, para establecer si él afecta o no la justicia y razonabilidad de las tarifas, ya que es con arreglo a ese criterio que el Poder Ejecutivo debe pronunciar su juicio definitivo. Será entonces la oportunidad de conocer hasta dónde ese aumento puede corresponder a una mejora en el salario de los obreros, ya que no será nunca posible resolver los conflictos entre el capital y el trabajo y asegurar la continuidad del servicio ferroviario reduciendo en forma apreciable las probabilidades de huelgas, sino a condición de formar y mantener el personal afectado a ese servicio¬ público sobre la base de una mejor retribución de su trabajo.
Ferrocarriles del Estado. - Al iniciarse la presente administración, encontró los Ferrocarriles del Estado intervenidos por una comisión parlamentaria designada por la honorable Cámara de Diputados a mérito de graves denuncias llevadas a su conocimiento, y sin esperar los resultados de esa investigación el Poder Ejecutivo se ha visto precisado a iniciar una por cuenta propia, a efectos de comprobar una serie de irregularidades.
Como consecuencia del estudio e investigación que se practican tendrá que modificarse la ley de organización de esos ferrocarriles como entidad autónoma, manteniendo sobre ellos un contralor efectivo y riguroso en su marcha administrativa que no lo ha tenido antes de ahora por la Contaduría General de la Nación y de carácter técnico y financiero relacionado con su sistema de explotación, por la ley general de ferrocarriles a semejanza del que ejercita esa repartición sobre las empresas particulares.
Dentro de esas finalidades tiene que ser un punto a resolverse a breve término, aun con todos los inconvenientes del momento, el acceso por línea propia a esta Capital, y de resultar eso imposible, radicar su administración en uno de los grandes centros servido por sus líneas.
El total de kilómetros de vía en explotación al 31 de diciembre de 1917, asciende a 6.139 kilómetros, y el déficit neto de explotación al cerrar el ejercicio de 1917, es de ($ 1.724.618,99 m/n.) un millón setecientos veinticuatro mil seiscientos diez y ocho pesos con noventa y nueve centavos moneda nacional.
Puentes y caminos. - Lo limitado de la partida asignada para conservar las obras y caminos construidos por la Nación ha impedido realizar una serie de trabajos de reparación indispensables, si se quiere mantener los caminos en condiciones de responder siquiera en parte, a las necesidades siempre crecientes del tráfico.
Con la refundición de la sección técnica del fondo de caminos, ley 5315, en la dirección de puentes y caminos así como la nueva división de zonas que se ha hecho del territorio de la República, a fin de asegurar la mayor eficiencia en el trabajo a realizarse, queda planeada la organización que ha de darse al personal técnico si vuestra honorabilidad se digna prestar su sanción al proyecto de ley de caminos que le será sometido por el Poder Ejecutivo en las sesiones de este año.
Obras hidráulicas. - La adquisición de la mayor parte de los materiales de uso normal en esta repartición ha continuado siendo difícil, por lo elevado de los precios a que se cotizan, y por la falta de muchos de ellos en plaza.
En cuanto al trabajo de dragado, con excepción de los dos meses que duró la bajante extraordinaria del año próximo pasado, ha podido efectuarse para mantener sin interrupción la navegación de los ríos con los calados normales, y el estado actual de los canales de acceso al puerto de la Capital y de los pasos del Río de la Plata y de los ríos Paraná y Uruguay, permiten la cómoda navegación de los barcos que acuden a nuestros puertos.
Las obras del nuevo puerto de la capital a cargo de la empresa constructora, están paralizadas desde setiembre de 1917, en razón de la falta absoluta de materiales de construcción, pero el Poder Ejecutivo en previsión de las necesidades que habría que llenar para facilitar la salida de una buena parte de la gran cosecha que ya se esperaba entonces, en noviembre 14 del mismo año decretó la ejecución de los trabajos necesarios para habilitar al servicio público, con carácter provisorio, la primera dársena, que permitirá, ya el próximo mes de julio, el atraque de barcos de gran calado para cargar directamente de los depósitos, que pueden almacenar hasta 200.000 toneladas. Ese trabajo se realiza con el material de la empresa, que lo ha facilitado sin cargo alguno para el gobierno computando sólo el costo efectivo de las obras que se realizan.
Tratando de mejorar las condiciones de navegación del Alto Paraná y atendiendo a reiterados pedidos de la casi totalidad de las poblaciones costaneras, el Poder Ejecutivo por decreto de 6 de mayo del corriente año ha ordenado el derrocamiento de los pasos más difíciles comprendidos entre Ituzaingó y Posadas, que no obstante ser una obra estudiada desde 1913 y reclamada urgentemente por esas poblaciones, se habían venido postergando.
Irrigación. - Los estudios y obras realizadas en el año próximo pasado, se han desenvuelto dentro de un programa reducido en razón de los escasos recursos que a ese fin han sido asignados por la ley general de presupuesto al expresado año. El detalle de todas ellas y los estudios de aquellas cuya realización es de urgencia os serán sometidos en la memoria del Ministerio que oportunamente será elevada a vuestra honorabilidad.
Arquitectura. - Los servicios que atienda la Dirección General de Arquitectura han podido realizarse con regularidad, no obstante los inconvenientes derivados de la actual situación anormal, para adquirir en plaza los materiales y elementos de trabajo necesarios para las obras.
Las obras que se realizan por empresas particulares en cumplimiento de contratos en vigor se han proseguido, debiendo limitarse su actividad a los términos que permitía la existencia de materiales disponibles.
En esta categoría de obras figuran las del nuevo edificio para la Dirección General de Correos y Telégrafos, el colegio nacional central de la Capital, ampliación del edificio de Correos y Telégrafos de Gualeguay y otras de menor importancia.
El importe total de las obras ejecutadas en tal forma durante el ejercicio último, asciende a $ 1.146.791.58, y la inspección y contralor de las mismas, que está a cargo de la Dirección General de Arquitectura ha podido efectuarse sin inconvenientes, pues el cumplimiento de las obligaciones contractuales se ha satisfecho debidamente por los contratistas.
En igual período, la misma Dirección ha ejecutado administrativamente, en edificios fiscales, con los elementos propios de que dispone, trabajos cuyo importe total asciende a $ 1.359.328,74.
Obras sanitarias. -Los servicios públicos a cargo de las "obras sanitarias de la nación han sido atendidos normalmente y sin ningún inconveniente durante el año anterior tanto en la Capital Federal como en las provincias.
La organización del personal técnico y administrativo, de acuerdo con las necesidades impuestas por el mayor desarrollo de las obras en explotación, se hizo a principio de 1917, y sólo se han introducido pequeñas modificaciones que han sido impuestas por razones económicas.
En la Capital Federal se ha aumentado la provisión de agua de las nuevas obras a los inmuebles situados en 1.800 hectáreas más que en el año anterior, y el número de esos inmuebles es de 5.100 y comprenden 5.617 locales.
Las obras domiciliarias han aumentado en igual fecha en 6.034 casas.
El producto líquido de las obras una vez pagados los gastos de explotación y servicios de los empréstitos, alcanzó en 1917 a 4.950.532,98 pesos y si esta cifra no ha sido más elevada se debe al aumento extraordinario en el precio de los combustibles y otros artículos, y sobre todo a la desvalorización de la propiedad urbana, pues el importe del servicio es proporcional a la renta comprobada o calculada que aquélla produce.
La disminución del producto líquido por la sola causa del menor valor de la propiedad es de 2.500.000 pesos al año, aproximadamente.
Obras de rectificación y canalización del Riachuelo. -En cumplimiento de las disposiciones de la ley número 9126 que resolvió la realización de las obras de rectificación y canalización del Riachuelo, así como las necesarias para facilitar el desagüe inmediato de las poblaciones que aquél manda en sus crecidas, fue necesario iniciar el levantamiento topográfico indispensable para determinar la cuenca hidrográfica del mismo y sus condiciones planialtimétricas.
La adquisición de terrenos destinados a ser ocupados por las obras ha preocupado a la Dirección. Ya al trazarse las obras proyectadas por el Poder Ejecutivo, se tuvo muy en cuenta los intereses públicos y privados que afectaban tratando constantemente que dentro de las condiciones técnicas a que la obra debe responder, aquellos experimentaran el menor perjuicio, inevitable a veces, en obras nuevas que se desarrollan en zonas pobladas donde se han creado derechos e intereses siempre respetables.
Varios propietarios, con amplio criterio evolutivo, han contribuido a facilitar la solución, donando las fracciones de su propiedad afectadas por el proyecto.
Los estudios en el terreno y el replanteo de las obras, que el estado de aquéllas ha permitido proyectar, ha continuado su curso; los primeros hasta alcanzar los confines de la cuenca por el N., NE., E. Y SE., parte del O. y S. faltando la zona hacia el S. y SO. Y el segundo hasta terminar los trazados que habían sido proyectados.
Señores senadores, señores diputados:
Quedáis enterados del estado de la Nación en su desenvolvimiento ascendente. Si el camino recorrido se presentó lleno de dificultades, podemos afirmar con satisfacción, que ellas han sido salvadas sin recurrir a medios extraordinarios; debemos también confiar en que serán despejadas del mismo modo las que se presenten en adelante; contando para ello el Poder Ejecutivo con vuestro patriotismo y buena voluntad en la sanción oportuna de las leyes que fuesen necesarias.
Imploro para el acierto de vuestras sanciones la protección del Altísimo, en esta hora solemne, en que me cabe el honor de inaugurar, como lo hago, el presente período de vuestras sesiones ordinarias.
HIPOLITO YRIGOYEN
NOTAS
[1] El Presidente Yrigoyen, por mensaje del 2 de febrero de 1918, solicitó autorización para ausentarse de la Capital. Tratado este pedido en el Senado, se le acordó una licencia restrictiva de treinta días. En la Cámara de Diputados se produjo un acalorado debate en el cual el bloque de diputados de la Unión Cívica Radical sostuvo que la sanción del Senado era lesiva para el Poder Ejecutivo, haciendo prevalecer finalmente su criterio, por lo que se acordó el permiso "para ausentarse temporariamente de la Capital". El doctor Yrigoyen partió de Buenos Aires el 14 de mayo, dirigiéndose a Bahía Blanca donde embarcó se en el acorazado Rivadavia rumbo a Comodoro Rivadavia, a los efectos de visitar las instalaciones petrolíferas. De regreso a Buenos Aires el día 21 de mayo, reasumió recién el mando el 27 del mismo mes. Debido a su ausencia inauguró el período legislativo el Vicepresidente de la Nación, doctor Pelagio Luna, el 16 de mayo.
[2] A tales efectos, por decreto del 23 de febrero de 1918, el Poder Ejecutivo nacional envió, como veedores federales a las provincias de Catamarca, La Rioja, San Juan y Santiago del Estero, a los doctores Horacio Martínez, Francisco Beiró, Luis Álvarez Prado y Avelino P. Ferreyra, por no ofrecer garantías los comicios en dichas provincias.
[3] Por ley 10.240 del 4 de agosto de 1917, se devolvió la normalidad al municipio de la Capital Federal.
[4] Renovación de la Cámara de Diputados; resultados de los comicios:
Capital: U. C. R.: 74.174 (7 diputados); P. S.: 49.354 (3 diputados); P.D.P.: 9.607.
Buenos Aires: U.C.R.: 115.607 (10 diputados); P. Conservador: 68.195 (5 diputados); P.S.: 7.691.
Santa Fe: Radicales disidentes: 32.221 (4 diputados); U.C.R.: 23.557 (2 diputados); P.D.P.: 22.293; P.S.: 1.815.
Entre Ríos: P.D.P.: 24.237 (6 diputados); U.C.R.: 23.357 (2 diputados); Radicales intransigentes: 4.693.
Corrientes: Liberales: 14.878 (4 diputados); U.C.R.: 13.139 (1 diputado); Radicales disidentes: 6.844; Conservadores: 8.871.
Córdoba: U.C.R. (azules): 30.147 (4 diputados); P.D.P.: 25.547 (1 di¬putado); Conservadores: 14.316; U.C.R. (rojos): 10.298.
Tucumán: U.C.R.: 17.560 (4 diputados); Liberales: 14.054 (1 diputado); Radicales disidentes: 4.318; P.S.: 2.235.
Salta: P. Conservador: 8.669 (2 diputados); U.C.R.: 2.239.
Catamarca: U.C.R.: 9.036 (2 diputados); P. Conservador: 8.808.
Jujuy: U.C.R.: 5.293 (1 diputado); Radicales disidentes: 4.416.
La Rioja: U.C.R.: 8.490 (1 diputado); otros partidos: 65.
San Juan: U.C.R.: 9.171 (1 diputado); P. Conservador: 7.060; P.S.: 984.
Mendoza: U.C.R.: 17.850 (2 diputados); P. Conservador: 4.582 (1 diputado); P.S.: 3.352.
Santiago del Estero: Fue anulada la elección.
San Luis: No hubo.
[5] Intervenciones federales del período:
Provincia de Corrientes: Intervenida por decreto del Poder Ejecutivo el 23 de noviembre de 1917, con motivo del conflicto existente entre el Gobernador y la Legislatura. Fue designado interventor el doctor Daniel Goitía, quien renunció en febrero de 1918, siendo reemplazado por el doctor José María Giuffra. La intervención terminó en agosto de 1919.
Provincia de Mendoza: Intervenida por decreto del 24 de noviembre de 1917, a los efectos de presidir la renovación del gobierno local, designándose interventor al doctor Eufrasia Loza. El mando fue entregado al gobernador electo, doctor José Néstor Lencinas, el 6 de marzo de 1918.
Provincia de Córdoba: Al producirse un conflicto entre el Poder Ejecutivo provincial y la Legislatura, ambos poderes solicitaron la intervención federal. El Congreso sancionó la ley 10.252, a los efectos de "garantizar a la Legislatura el libre ejercicio de sus facultades constitucionales". Esta ley fue vetada por el Poder Ejecutivo el 24 de setiembre de 1917, considerando parcial la sanción. Es intervenida por decreto del 28 de noviembre, designándose interventor al doctor Daniel J. Frías, quien devuelve la normalidad a la Provincia.
Provincia de Jujuy: Intervenida por decreto el 7 de diciembre de 1917, a causa de un conflicto institucional. El interventor, doctor Justo P. Luna, declaró caducos todos los poderes y convocó a elecciones, entregando el mando al gobernador electo el 5 de abril de 1918.
Provincia de Tucumán: A pedido del gobernador, que fuera sometido a juicio político por la Legislatura, es intervenida por decreto del 7 de diciembre de 1917. Se renueva la Legislatura y es repuesto el gobernador a los siete meses de iniciada la intervención.
Provincia de La Rioja: A los efectos de la "reorganización de todos sus poderes", es intervenida por decreto del 4 de abril de 1918, nombrándose interventor al doctor Daniel J. Frías. Esta intervención concluye en febrero de 1920.
Provincia de Catamarca: Es intervenida en consideración del estado de subversión institucional en que se encontraba, por decreto del 27 de abril de 1918, concluyendo la misión del enviado federal, doctor Fabio López García, el 19 de enero de 1920.
Provincia de Salta: En la misma fecha de la anterior y con los mismos fundamentos. Concluye el 7 de enero de 1919.
[6] Se refiere especialmente al llamado "caso Luxburg". El conde Karl von Luxburg estaba acreditado como Ministro alemán ante nuestro gobierno. En los primeros días de setiembre de 1917 fueron dados a conocer en Washington tres telegramas cifrados, en los cuales el representante del Kaiser, haciendo referencia a los buques argentinos "Orán" e "Iguazú", decía que fuesen "hundidos sin dejar rastros". Dos días más tarde, confirmada la autenticidad de los despachos, el gobierno argentino, con fecha 12 de setiembre de 1917, expidió un decreto por el cual se hacía saber a dicho diplomático que había dejado de ser persona grata y le hacía llegar sus pasaportes. El 16 de setiembre, el Ministro argentino en Berlín, doctor Molina, comunicaba a la Cancillería que el gobierno alemán lamentaba lo ocurrido y desaprobaba en absoluto los conceptos de los documentos atribuidos a Van Luxburg.
A raíz de estos acontecimientos, ambas cámaras del Congreso se pronunciaron en favor de la ruptura de relaciones diplomáticas con Alemania (sesiones del 19 de setiembre en el Senado y 22 y 24/25) en Diputados, concurriendo a ellas el Ministro interino de Relaciones Exteriores, doctor Pueyrredón, quien brillantemente explicó la actitud del Poder Ejecutivo.
El Presidente Yrigoyen mantuvo su línea de conducta trazada en la gestión de los negocios internacionales, siendo su tesis que mientras no se hubiese inferido agravio a la Nación, sin una inmediata satisfacción las actitudes formales de ruptura eran extemporáneas.
Considerándolo de interés, extractamos algunos párrafos del discurso pronunciado en la citada sesión permanente de la Cámara de Diputados, del 24/25 de setiembre de 1917, por el diputado doctor Horacio B. Oyhanarte.
Refiriéndose a la neutralidad, la dividió en dos tipos: "sumisa" y "activa y altiva". Con respecto a la primera dijo:
"Se hace necesario a mi tesis estudiar qué clase de neutralidad había asumido o soportado hasta este momento la Nación. Con los antecedentes que me he permitido referir ante la honorable Cámara, voy a llegar a la demostración palmaria de que la neutralidad que se nos entregó, que la neutralidad que recibimos era, en primer término, fría y egoísta, y, en segundo término, era una neutralidad sumisa que tocaba los lindes mismos de la humillación."
Con respecto a la segunda, dijo:
"Desde el 12 de octubre en adelante no ha tenido una política egoísta y replegada; no ha contemplado los sucesos desde afuera con un significativo encogimiento de hombros, sino que se ha mezclado en el turbión de todos los acontecimientos; y al par que exigía ante el gobierno teutón las reclamaciones más austeras, más altas. más definidas que haya podido plantear jamás una nación a otra, abría sin reticencias sus puertos y ofrecía su franca hospitalidad a la escuadra americana y luego a la Inglaterra representada por el Glasgow, sin reparar en la significación que esos acontecimientos pudieran haber tenido en lo que respecta a las reclamaciones pendientes ante el gobierno de Berlín."
Se refería, en el primer aspecto, a los casos durante el gobierno de Victorino de la Plaza, del cónsul argentino en Dinant, que no fue resuelto, mandando el expediente al archivo; y al apresamiento del vapor "Presidente Mitre", por las fuerzas navales británicas, y llevado como presa al puerto de Montevideo a través de aguas territoriales argentinas. Con respecto a este último episodio, el diputado Oyhanarte manifestó: "Aquí, no se trataba de considerar si existían o no perjuicios. Se trataba si había o no derecho; se trataba de saber si el gobierno inglés podía apresar un buque de nuestra bandera, como en el caso alemán no se trataba de saber si a ese gobierno le conviene o no hundir nuestros barcos en el mar libre, sino si le era permitida tan extraordinaria pretensión. Con el criterio del canciller Murature [Ministro de Relaciones Exteriores de De la Plaza] hubiésemos tenido perdidas las reclamaciones argentinas del Toro y del Monte Protegido, y de ahí seguramente nace ese común consenso para ocultar las cosas y para no leer en la simplicidad de los documentos lo que los documentos claramente expresan".
Con respecto a la neutralidad "activa y altiva" y en relación con el hundimiento de las naves argentinas por la extensión de la guerra submarina sin restricciones, dijo: "¿Pero podían acaso las necesidades de la guerra modificar sin nuestro consenso los vínculos internacionales y los principios universalmente admitidos del derecho público?. El gobierno argentino no guardó ante esta pretensión del gobierno imperial una comprometedora aquiescencia, pues declaró que ajustaría su conducta a los principios universales del derecho público. Y cuando llegó la oportunidad, con tal entereza se le abocó la cuestión al gobierno de Berlín, que las pretensiones de hundir los buques neutrales fueron rechazadas de plano sin admitirse sobre ellas siquiera controversia... Han de hacerse, empero, las cosas en derecho. Una nacionalidad que tenga conciencia de sí misma no puede salir de su neutralidad porque sí, máxime con todas las explicaciones y seguridades que se le han tributado, sin esperar que los hechos desmientan las promesas."
[7] Ver mensaje del 30 de junio de 1917.
[8] Notas del 10 de abril de 1917; 1° de febrero de 1918; 2 de febrero de 1918 y otra de la misma fecha.
[9] A comienzos de 1918, el gobierno del Uruguay temió la invasión de su territorio, de parte de las colectividades alemanas de Río Grande do Sul.
[10] Lo que dio motivo a un voto de agradecimiento de parte de la Cámara de Representantes del vecino país. El gesto de Yrigoyen fue un fiel exponente del sentido que él daba a la fraternidad americana.
[11] En diciembre de 1917. Esta delegación enviada por el presidente de Méjico Venustiano Carranza, al Congreso de naciones latinoamericanas (ver nota del mensaje de 30 de junio de 1917), estaba integrada por los delegados Licenciado Luis Cabrera y Sr. Gensayn Ugarte, acompañados de numerosos colaboradores.
[12] Encabezada por el doctor Fernando Saguier.
[13] Dicha embajada fue presidida por el Canciller interino doctor Honorio Pueyrredón.
[14] Fue designado el vicealmirante Domecq García.
[15] Se trataba del gobierno republicano de Kerensky, derribado en noviembre de 1917 por los bolcheviques, 14 de setiembre de 1917.
[16] Mensaje y proyecto de ley del 21 de febrero de 1918, en cuyos fundamentos el Poder Ejecutivo decía: "Las naciones que no intensifican su acción enérgicamente para extirparla [se refiere a la tuberculosis] sufren consecuencias funestas para la vitalidad de sus organismos". Esbozando el plan profiláctico decía: "Desde ya puede anticiparse que el plan ha de comprender la habilitación de dispensarios, hospitales forestales y sanatorios de montaña y marítimos para enfermos e indigentes y la fundación de institutos de previsión que llevaran un servicio demográfico completo, intensificando la campaña contra el alcoholismo, mejorando la precaria situación de las clases pobres y velando por las condiciones de vida de las madres y de los niños". Se establecía, además, la inspección domiciliaria, la desinfección permanente, la asistencia médica y social y el suministro de alimentos y medicamentos. Para la realización de estos fines se aumentaba el impuesto sobre la lotería nacional hasta un 20 por ciento. Al no ser tratado este plan por el Congreso, el Poder Ejecutivo volvió a insistir el 31 de julio de 1919 y nuevamente el 2 de setiembre de 1922.
[17] El edificio destinado al solarium de Mar del Plata inaugurado el 24 de febrero de 1918, fue construido, según consta en actas de la Sociedad de Beneficencia, con parte de los sueldos donados por el presidente Yrigoyen.
[18] En el mensaje del 26 de junio de 1917, el presidente Yrigoyen explicaba la situación financiera que heredaba del gobierno saliente: "Los anales de las finanzas argentinas no registran estado análogo al que ofrecía el Tesoro Nacional el 12 de octubre de 1916. Pesaba sobre el erario público una enorme deuda flotante, contraída a corto plazo, bajo términos angustiosos y sin seguridad alguna para su renovación. A los pocos días de la fecha mencionada, vencían compromisos por valor de 86 millones y medio de pesos. Las fuentes de renta se hallaban, las que no segadas, sufriendo disminuciones sensibles; el crédito de la banca local, casi colmado por las demandas reiteradas de los gobiernos anteriores; el descubierto que la ley acuerda en el Banco de la Nación, agotado, y sin otro recurso para el pago de la administración que los insuficientes ingresos de las rentas generales. A lo que se deben agregar compromisos con el extranjero, cuyo cumplimiento no podía diferirse sin desmedro evidente para el crédito de la Nación".
[19] Proyectó el Poder Ejecutivo una ley tendiente a proveer al régimen de la circulación monetaria, el redescuento de los valores comerciales y la organización del crédito y de la banca, para el desarrollo y estabilización de la producción nacional. Esta ley creaba el Banco de la República (mensaje del 26 de julio de 1917), diciendo en sus fundamentos: "Dicho Banco fomentará las fuentes de producción de todo el país, al igual que el Banco de la Nación lo hacía con el comercio... Los encajes elevados y excesivos de los bancos, responden a dos causas fundamentales: la saturación del crédito comercial a corto plazo, única forma que ofrecen sus capitales; y la falta de un régimen bancario oportuno y previsor que lo ponga a cubierto de continuas contingencias y eventualidades a que están expuestos aun en épocas normales. Se ha privado así al país de los recursos que le brinda el capital habilitado a término amplio y en condiciones fáciles de reintegro para el tomador, Actualmente la banca ofrece sus capitales en forma, término y condiciones que el trabajo no puede aceptar."
[20] En el Mensaje del 20 de agosto de 1917 decía el Poder Ejecutivo: "Las tareas en que el Poder Ejecutivo tiene mayor empeño son: disminuir los impuestos que gravan los artículos de primera necesidad para hacer menos difícil la vida de las clases trabajadoras y reducir hasta donde sea posible, la enorme deuda pública que pesa sobre el país, y que ha llegado este año a absorber el 50 % de las rentas ordinarias de la Nación".
[21] La ley 9.480, de depósitos de oro en las legaciones de la República, facultaba al Poder Ejecutivo para recibir oro sellado en ellas, de parte del comercio y de la banca; el Ministerio de Hacienda, con el aviso telegráfico que recibiera de las legaciones, extenderla un bono a favor de la Caja de Conversión por el importe del oro depositado. Contra la entrega de ese bono, por intermedio del Banco de la Nación, la Caja de Conversión entregaría al mismo banco el equivalente en pesos papel, para -ser acreditado a quien correspondiere, de acuerdo con las instrucciones del Ministerio de Hacienda.
Al solicitar los representantes de las potencias aliadas el traslado a la Argentina de ese oro o la compra con él de títulos de la deuda pública de los países en que estaba depositado, el gobierno ordenó el traslado material sobre Madrid y el arbitraje sobre Nueva York, obteniendo en esa forma un beneficio de 10 millones de pesos. Hacemos notar que en 1914 y en 1915 se hicieron análogos traslados, sufriendo la República algunas pérdidas en la diferencia.
En setiembre de 1918, ya factible su traslado desde los Estados Unidos, fue enviado el acorazado "Rivadavia" para transportarlo al país.
[22] De acuerdo con las fases dé la doctrina de los costos comprados.
[23] Ver mensaje de 1919, notas 24 a 27.
[24] Declarada el 13 de marzo de 1918 la huelga general estudiantil, el Poder Ejecutivo, ante el requerimiento del estudiantado, intervino la Universidad de Córdoba, por decreto del 11 de abril, en vista de "que los sucesos ocurridos denuncian la existencia de un gran malestar" y "con el objeto de remover las causas originarias y determinantes". Se designó interventor al doctor José Nicolás Matienzo. (Ver: La Reforma. Universitaria en la Universidad de Córdoba y en la Universidad de Buenos Aires. Año 1918. Publicación oficial, 704 págs.)
[25] Fue enviado al Congreso el 31 de julio de 1918. Este proyecto tendía a dar estabilidad y unidad a las diversas instituciones que dirigen la enseñanza. Abarcaba con toda amplitud y desde sus diversos aspectos, desde la escuela primaria hasta los altos estudios universitarios, todo el problema de la enseñanza. En los fundamentos decía: "En lo referente al problema del analfabetismo, en cuya solución tan empeñadas están las distintas representaciones públicas del Estado, el proyecto provee algunos medios, no excogitados hasta ahora, la creación de escuelas tutoriales, destinadas a reconcentrar en lugares determinados de las campañas a los niños analfabetos, que no puedan concurrir a ninguna escuela común. Las enseñanzas prácticas se impartirán de acuerdo con las necesidades que reclamen las zonas de influencia de cada escuela, en lo referente a producción, comercio, industrias y tendencias de la población, a efecto de imprimir nuevas orientaciones a las actividades de la juventud argentina." (Ver la misma publicación citada en la nota anterior.)
Establecía, además, la absoluta gratuidad de matrícula y la fundación de escuelas en las provincias y territorios en lugares donde hubiere por lo menos veinte analfabetos.
Sólo en el año 1917 se crearon 643 escuelas primarias.
[26] Fue elevado al Congreso el 12 de julio de 1918. Al no ser sancionado se reiteró el 17 de agosto de 1922.
[27] Por decreto del 14 de noviembre de 1917 se designó provisionalmente al capitán de fragata don Felipe Fliess, para hacerse cargo de la explotación de Comodoro Rivadavia.
[28] Adquirido en marzo de 1918, e incorporado a los transportes de la Armada.
[29] En este período se libraron al servicio público las estaciones radiotelegráficas de San Julián (Santa Cruz), de Punta Delgado (Chubut), y de Martín García.
[30] Desde el comienzo de su gobierno, el doctor Yrigoyen demostró honda preocupación por solucionar este grave problema, remitiendo el 16 de diciembre de 1916, al Congreso, un mensaje solicitando fondos para su creación. Insistió el 28 de diciembre de 1916, 29 de enero de 1917, 7 de setiembre de 1917 y 16 de setiembre de 1918. El 31 de agosto de 1918 envió un proyecto de creación de astilleros, concordando con un plan de organización de la navegación fluvial y costera, que tampoco fue tratado.
[31] Ver nota 34, del mensaje del 30 de junio de 1917.
[32] Para el fomento agrícola-ganadero y la protección de la familia rural el Poder Ejecutivo nacional proyectó la "ley del hogar" (homestead), que, remitida en diciembre de 1916, fue convertida en ley el 25 de setiembre de 1917 con el número 10.284. Por un proyecto enviado el 30 de setiembre de 1917 se solicitaba al Congreso la reforma del régimen del Banco Hipotecario Nacional, para así permitir la adquisición de tierras por los colonos, que recién fue sancionada el 20 de setiembre de 1919.
[33] Trigo: 6.086.445 toneladas (aumento del 200 por ciento sobre el año anterior); Lino: 497.578 toneladas; Maíz: 996.245 toneladas.
Asimismo, la industria azucarera aumentó considerablemente, pasando la producción de 88.076 a 127.186 toneladas.
[34] El 3 de agosto de 1917, el Poder Ejecutivo pidió al Congreso que le autorizara a adquirir en el extranjero, si fuese necesario, las partidas de arpillera, bolsas e hilos de sisal, que exigiera la nueva cosecha, declarando, además, de utilidad pública, los mismos productos para su expropiación. Por otro proyecto del 4 de setiembre del mismo año solicitó se eximiera de impuesto a la importación de las semillas para siembra. El gobierno quería estar prevenido para evitar la falta o monopolio .de esos productos, en la época que fuesen necesarios.
[35] El Congreso aprobó los convenios que con Inglaterra y Francia había firmado el Poder Ejecutivo, remitidos por éste el 15 de enero de 1918. Dichos países adquirían 2.500.000 toneladas de trigo, lino y avena, lo que importaba acordarles un crédito de varios centenares de millones de pesos. Interesa, como muestra de la diplomacia económica de Yrigoyen, esta operación, que permitió la colocación ventajosa de la cosecha de 1918 y la salida de muchos frutos del país, como ser lanas, cueros, quebracho, conservas, etc.
[36] Este proyecto, que no llegó a ser tratado por el Congreso, fue remitido el 27 de setiembre de 1917 y establecía en él, el Poder Ejecutivo, todos los principios básicos que deben regir a dicha industria, todo lo que hace al detalle y a las modalidades propias de la misma .
[37] Aumentó, asimismo, la explotación de pozos. En el período de 1907 a 1916, entraron en funcionamiento 35 pozos, mientras que en el período 1917-1918 se explotaron 38 nuevos pozos.
[38] Los obreros ferroviarios reclamaban mejoras en sus condiciones de trabajo y salarios, desde el año 1902, pues la ley general de ferrocarriles no contenía disposiciones referentes al trabajo del personal, y el reglamento general de ferrocarriles, bien poco disponía al efecto. Las empresas hacían trabajar 12, 14 y hasta 20 horas diarias al personal de máquinas, pagando como extraordinarias las horas que pasaran de 8, 10 o 12, según los casos. De manera que en la práctica no existía limitación en las horas de servicio. Tampoco existía escala para los sueldos y jornales. Numerosas fueron las huelgas, en 1902, 1904, 1906, 1907 y 1912, especialmente esta última, en la que tornaron parte 9000 obreros, sin que ni el gobierno ni las empresas se preocuparan por solucionar el problema. Así llegamos a 1916, en el cual ocupa la primera magistratura el doctor Yrigoyen. El gobierno radical llegó al fondo del asunto, buscando cuidadosamente la causa de las huelgas, que no era otra que la falta de reglamentación de las condiciones del trabajo (horas de trabajo, salario y descanso). Inmediatamente, el Poder Ejecutivo auspició la sanción de una ley reglamentaria del trabajo ferroviario, que la Cámara de Diputados aprobó el 24 de setiembre de 1917. Al no hacerlo el Senado, el Poder Ejecutivo insistió el 22 de agosto de 1918.
Ante el obstruccionismo del Senado y frente a la huelga de los obreros ferroviarios, el Poder Ejecutivo, que había reunido todo el material de estudio necesario, dictó, el 11 de octubre de 1917, el reglamento general del trabajo del personal ferroviario, estableciendo: horario continuo y discontinuo, duración normal de la jornada (diario o semanal, en su caso) de trabajo para las diversas categorías de obreros, etc. Se fijaba la remuneración del trabajo extraordinario, la duración de las licencias normales o por enfermedad y se obligaba a las empresas a comunicar a la Dirección General de Ferrocarriles las condiciones de admisión, ascensos, categorías, sueldos, primas, viáticos, etc. Los obreros comprendieron que se les hacía justicia y volvieron al trabajo el 20 de octubre. El Poder Ejecutivo completó la antedicha reglamentación con un sinnúmero de otras disposiciones que fijaron definitivamente las condiciones de trabajo de los obreros ferroviarios.
[39] Ley N° 2.873 (del año 1891).
Fuente: Héctor Rodolfo Orlandi, "Yrigoyen y la Unión Civica Radical", pag. 125 y ss.
Fuente: Héctor Rodolfo Orlandi, "Yrigoyen y la Unión Civica Radical", pag. 125 y ss.
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