Circular a los Gobernadores
de Provincia sobre fomento de trabajo rural
Hipólito Yrigoyen
[9 de Abril de 1920]
Buenos
Aires, abril 9 de 1920.
Tengo
el honor de dirigirme a Vuestra Excelencia, empeñando su celo patriótico a fin
de cooperar en la acción del Poder Ejecutivo, tendiente a estimular y favorecer
el trabajo nacional por todos los medios a su alcance.
Se han abierto nuevos horizontes a la actividad general y la reconstrucción mundial reclama cada vez más el aporte de los pueblos productores para satisfacer sus consumos siempre crecientes.
Se han abierto nuevos horizontes a la actividad general y la reconstrucción mundial reclama cada vez más el aporte de los pueblos productores para satisfacer sus consumos siempre crecientes.
No
gravitan ya sobre la Nación ,
exacciones ni cortapisas opuestas al libre desenvolvimiento de la labor
colectiva, y es entonces necesario que los poderes públicos orienten, estimulen
y favorezcan la intensificación del trabajo productivo.
Análoga
invitación se hizo por este gobierno a principios de 1917. Ella fue escuchada
por el pueblo trabajador, dando por resultado las grandes cosechas sucesivas
que, colocadas más tarde en condiciones ventajosas, levantaron al país de su
crisis y restablecieron el bienestar general en sus múltiples manifestaciones.
Las
circunstancias actuales son igualmente propicias a una propaganda semejante y
el Poder Ejecutivo de la Nación
entiende llenar una verdadera función social al estimularla en esa forma.
Una
exagerada tendencia al urbanismo, aumenta la población de las ciudades restando
actividades a las campañas. Ese fenómeno natural si se quiere, pero
inconveniente, se traduce en disminución de la producción y aumento de los
consumos; contribuyendo al encarecimiento de los artículos de primera necesidad
y a la elevación incesante del precio de la vivienda.
Las
medidas ocasionales difícilmente podrán conjurar todo ese mal, si la corriente
popular no toma otro camino.
El
Gobierno de la Nación
ha adoptado medidas y ha obtenido la sanción de leyes tendientes al fin
indicado.
La
tierra pública, inspeccionada y reorganizada se ofrece en condiciones
favorables para quienes quieran trabajarla arraigando su hogar en ella. En la Dirección General
de Tierras y Colonias se pueden solicitar informaciones, que serán
suministradas con rapidez, sin las perniciosas trabas de otros tiempos. Allí al
que desee obtener un lote en los territorios se le informará sobre las
condiciones de la tierra, los cultivos a que se presta, calidad y profundidad
del agua, vías de comunicación y medios de transporte.
La
nueva ley del Banco Hipotecario Nacional permite acordar préstamos ,: hasta; el
80 % del valor de compra sobre lotes de campo, no mayores de 200 hectáreas
pagaderos en las ventajosas condiciones que son conocidas.
Acuerda
igualmente préstamos hipotecarios hasta esa suma para los empleados públicos,
con facilidades que les permitan adquirir con ese ahorro obligado, una
propiedad, que será el mejor seguro para su familia. La ley del hogar faculta
al Gobierno para conceder gratuitamente pequeñas fracciones de tierra
inembargable; susceptible de explotación ventajosa.
Los
perfeccionamientos de nuestras tareas rurales y sus nuevas industrias
derivadas, ofrecen al hombre emprendedor seguridad de éxito y los halagos de
una vida física y moralmente sana, sin las incertidumbres de lucha febril de
las ciudades.
En
estas condiciones el Poder Ejecutivo de la Nación considera que es necesaria la difusión
constante y matemática de estas informaciones, dando todo género de facilidades
y estimulando a los empleados públicos que tienen a su cargo esas funciones, a
fin de que, no ahorren esfuerzos para encauzar las actividades en el sentido
indicado.
Una
campaña semejante realizada constantemente y traducida en actos efectivos, de
modo que el trabajador halle en los Poderes Públicos el apoyo y no la rémora de
sus iniciativas, debe necesariamente modificar la actual orientación hacia los
centros poblados, llevando nuevas energías a la producción de los campos y con
ello afirmando la riqueza general, el bienestar de los pueblos y la grandeza de
la patria.
No
dudo que el gobierno de V. E., compenetrado de estos mismos anhelos prestará
preferente atención a esta iniciativa, pudiendo contar en todo momento con el
apoyo del Gobierno Nacional, para llevarla a cabo en la mejor forma posible.
YRIGOYEN
Fuente:
“Ley 12839. Documentos de Hipólito Yrigoyen. Apostolado Cívico – Obra de
Gobierno – Defensa ante la Corte ”,
Talleres Gráficos de la
Dirección General de Institutos Penales, Bs. As 1949.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario