Renuncia y donación de H. Yrigoyen a sus emolumentos como Presidente de la Nación (1916)

RENUNCIA Y DONACION A SUS EMOLUMENTOS COMO PRESIDENTE DE LA NACIÓN

Hipólito Yrigoyen
[25 de Marzo de 1916]

A la Presidente de la Sociedad de Beneficencia Nacional, Sra. Elena Napp de Green

Marzo 25 de 1916.

Distinguida señora:

 Una imposición nacional ha hecho que mi nombre figure en la formula con la que el pueblo argentino concurrirá a los comicios generales de la República, buscando la reparación moral y política a que está consagrado. 
Ante esa sanción pública deseo, cuando menos, por impulso de mi fuero íntimo, poner en conocimiento de la Sociedad de Beneficencia, tan dignamente presidida por Ud., que si llegara el ejercicio de tales funciones, desde ahora renuncio los emolumentos correspondientes a todo el período gubernativo, a favor de las instituciones de misericordia que más lo requieren.

Con este motivo tengo el agrado de saludar a usted con mi más respetuosa consideración.

H. Yrigoyen.

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DOCTOR HIPÓLITO YRIGOYEN

Distinguido señor:

He tenido la satisfacción de recibir y puesto en conocimiento de la Sociedad de  Beneficencia de la Capital, la conceptuosa nota en que usted comunica por mi intermedio, que ante la sanción pública  que hace figurar su nombre en una fórmula para las próximas elecciones generales, ha resuelto por intermedio de su fuero íntimo que si llega al ejercicio de tales funciones dedicará los emolumentos de todo el período gubernativo a nuestras instituciones de misericordia que más los requieran.

La Sociedad de Beneficencia, que siente repercutir en su seno las angustias de los desamparados, el dolor de los que sufren, acoge con gratitud y aplauso todo donativo, todo propósito encaminado a mitigar penas y se complace también en que un ciudadano tan caracterizado como usted, comparta estas ideas humanitarias.

No son una novedad para la Sociedad de Beneficencia que me honro de presidir, pues existe por disposición de ella en el Hospital de Niños, una placa de bronce conmemorativa de que usted tuvo la generosidad de donar a ese establecimiento sus sueldos de profesor durante 17 años.

La saluda con su mayor consideración.

Elena Napp de Green.