agosto 20, 2010

Carta de Sarmiento al Senador estadounidense Charles Sumner, con motivo de la supresión en su país del Departamento Nacional de Educación (1867)

CARTA AL SENADOR DE MASSACHUSETTS CHARLES SUMNER, CON MOTIVO DE LA SUPRESION EN SU PAIS DEL DEPARTAMENTO NACIONAL DE EDUCACION [1]
Domingo Faustino Sarmiento
[1867]

New York
Al Sr. Senador Sumner
Honorable Señor:
Alentado por la distinción que generosamente me ha conferido, me tomo la libertad de someter a vuestra esclarecida consideración algunas observaciones acerca de un tema que pronto será tratado en vuestro Senado y en cuyas conclusiones favorables están profundamente interesados los Estados Unidos como así también la civilización de las masas populares y los principios republicanos del mundo entero.
He sabido que se ha resuelto la supresión del Departamento Nacional de Educación y si la medida se lleva finalmente a cabo, producirá una reacción deplorable en contra del interés cada vez más creciente inspirado por los últimos avances en la educación pública.
Para estadistas de su talla, mis sugerencias resultarían de muy poco valor si yo pretendiera proponer nuevos planes sobre temas en que Norte America se destaca por sobre las otras naciones.
Pero puede ser interesante que se conozca la impresión que esta decisión causaría en otros pueblos y mis sentimientos en este caso en particular, podrían ser la expresión de sus aspiraciones comunes.
Yo puedo hablar de Sudamérica donde 20 o 30 millones de seres humanos se agitan en un caos de revoluciones, que no conducen a nada-porque faltan ciertos elementos de gobierno-y yo que he recientemente visitado Europa, he conversado con personas eminentes sobre la saludable influencia .que han comenzado a ejercer los Estados Unidos.
Cuando Europa se recuperó de la sorpresa y se maravilló ante la feliz terminación de la pasada guerra civil, y del triunfo de las instituciones republicanas, entre todas estas circunstancias incomprensibles a la distancia, que habían traído aparejado este resultado- se destacó una claramente: que detrás de Lincoln, el Congreso y Grant, EXISTIA UN PUEBLO QUE SABIA LEER Y ESCRIBIR.
La república se presenta ahora ante aquellos que confían en la libertad en el mundo, con LA ESCUELA como base de su Constitución.
Para el economista político, la escuela norteamericana, -que crea al productor -explica el prodigioso desarrollo de la riqueza; y en cuanto a los gobiernos propiamente dichos, el hecho que los Estados Unidos y Prusia sean considerados como grandes naciones está directamente relacionado con la educación popular que se brinda en dichos países
Inglaterra y Francia han demostrado últimamente que se han beneficiado con la lección interesándose en la actualidad por la difusión de la educación .Esto se debe claramente a la influencia ejercida por las instituciones americanas en sus formas más reconocidas.
El distinguido profesor Laboulaye, que tanto ha contribuido a la difusión de las instituciones americanas en Europa, hace poco tiempo, introdujo a los obreros de Lyon la figura de Horace Mann como el único personaje comparable a Washington en lo que concierne al rol que jugó para la definitiva y perdurable organización de la democracia norteamericana.
Pero en la mayor parte del mundo actual, si bien se conocen los logros obtenidos por las organizaciones educativas americanas son muy pocos los que saben de su modo de operar o de su organización.
En Inglaterra los informes, datos e ideas provienen generalmente de los Estados Unidos y estoy en conocimiento que el ex ministro Ratazzi que deseaba organizar un vasto sistema de educación en Italia, lamentó no tener acceso a los documentos precisos con los resultados satisfactorios de los Estados Unidos, el único país que sirve de guía a este respecto.
El discurso del honorable Sr. Garfield en la cámara de representantes a favor de la creación de un Departamento Nacional de Educación ha sido reproducido en las prensas de Sudamérica para estimular la adopción de la misma medida y otra del Profesor Wickerham de Pensilvania ha tenido la misma aceptación en Francia y Sudamérica.
[…]
Osaré, con cierta timidez, hacer una observación con respecto a los Estados Unidos propiamente dicho. El mayor antagonismo entre los estados del norte y del sur se ha originado, a mi juicio, en que en el Sur se ha seguido con el mismo plan de la vieja sociedad europea y de Sudamérica en tanto que el Norte ha avanzado al haber adoptado planes nuevos y más distintivos
El sistema educativo en el Sur se ocupa sólo de la educación en universidades y colegios, como sucede en Inglaterra, Francia, Italia, España y Sudamérica dejando de lado a la mayoría del pueblo sin desarrollar su preparación intelectual.
El signo distintivo del avanzado sistema de gobierno norteamericano lo constituye la Escuela Pública y si el Sur adopta este sistema, su mejoramiento estará asegurado.
Para los republicanos de Europa y Sudamérica, los norteamericanos han agregado una nueva institución de gobierno a la República la de la Escuela Pública, con lo cual resuelven una grave dificultad que los antiguos Republicanos no podían resolver.
La república norteamericana tiene un gobierno que posee una constitución escrita seguida del discurso escrito.
Atenas, Roma, Venecia, eran ciudades gobernadas de palabra desde el Forum.
Washington es sólo el escritorio donde se escriben las leyes y en donde se dan las razones que las contiene, de modo que al siguiente día la gente, ya sea de California, Chicago, o Richmond pueden leerlas por escrito.
Pero la Republica de hoy en día se extiende indefinidamente, porque la gente gobierna desde su lugar de residencia, ya sea Egipto, en Capua o en Grecia, porque pueden leer lo que se les envía en forma escrita
Si por lo tanto, las instituciones republicanas se difundieran por todo el mundo, los patriotas, en lugar de hacer revoluciones, comenzarían por fundar escuelas públicas imitando a los Estados Unidos, para cimentar sus futuras constituciones
Si el protestantismo, al requerir de los cristianos que sepan leer de modo de poner en sus manos la Biblia, han contribuido por este único medio al desarrollo y mejoramiento de la raza humana, la ESCUELA de la república americana demostrará la ineficacia de las viejas aristocracias y de los modernos gobiernos represivos, al suprimir la ineptitud del pueblo y sus frutos legítimos-las revoluciones
Entenderá el porqué, con estas ideas y expectativas, deploro la supresión del Departamento Nacional de Educación, que supone ser una guía para el país y en el exterior, para los rezagados del Sur de los Estados Unidos, y el Faro para otras naciones, en el nuevo camino señalado por el norte.
Tan persuadido estaba de la influencia que este Departamento estaba destinado a marcar, que me hice presente en las reuniones de Superintendentes de Escuelas de Washington e Indianápolis para hacer oír mi voz en ellas y fundé una revista educacional en español [2] para difundir por toda Sudamérica las importantes experiencias que este organismo público llegara a proveer.
Si bien el Departamento Nacional de Educación no reviste interés pues no ha arrojado los esperados resultados prácticos en el Sur, no se debe permanecer indiferente sin embargo, a las ventajas que otras naciones puedan cosechar de los trabajos realizados por este organismo.-naciones como la mía sumida en la obscuridad en lo que concierne a la organización de la Escuela Primaria Pública.
Que la esperanza puesta en beneficiar a millones y mejorar la condición de la raza humana en todo el mundo les induzca a reavivar y mantener siempre ardiendo la antorcha que difundirá esa luz.
Tengo el honor de subscribirme
DOMINGO F. SARMIENTO

[1] Publicada en: “Life in the Argentine Republic in the days of the tyrants; or, Civilization and Barbarism…”, de Sarmiento (1868) Traducida por María S. Cárdenas (autora de “Mary Mann, la amiga incondicional de Sarmiento”) como colaboración en la conmemoración del 120º Aniversario del fallecimiento del Gran Maestro, dn. Domingo Faustino Sarmiento.
[2] Ambas Américas.

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