Crónica periodística del Diario La Prensa, sobre la Declaración de la Unión Cívica Radical, a una invitación de la juventud para un mitin conjunto (1910)

REVOLUCION Y ABSTENCION

CRONICA PERIODISTICA SOBRE LA Declaración de la Unión Cívica Radical, A UNA invitación DE LA JUVUNTUD para un Mitin Conjunto

Diario La Prensa

[17 de Diciembre de 1910]

La invitación que la junta ejecutiva de la juventud, organizadora del mitin, que se celebra hoy, hizo a la Unión Cívica Radical para solicitar su adhesión al acto de pública protesta contra el asunto de tierras y colonias, ha sido contestada por la mesa directiva del Partido con una nota, en la que expresa que ella contesta a la invitación formulada, porque estando el comité nacional constituido por representantes de los estados de la República y por ser la Unión Cívica Radical extraña a toda tendencia partidaria y a toda política militante, no se convoca sino a los efectos de su misión esencialmente fundamental.
Dice que, con esos propósitos y caracteres superiores, incólumes desde tantos años ha y desdeñando siempre la utilitaria vida cotidiana, mantiene viva la protesta con todas las abnegaciones, desprendimientos y sacrificios, de que es capaz el espíritu en la prosecución de los grandes acontecimientos, sobre los cuales se cimentan y prosiguen todas las redenciones y conquistas de la civilización humana.

La Unión Cívica Radical, la realiza, no de manera casuística y personal, ni por circunstancias incidentales o acomodaticias, sino genérica y permanentemente con la más íntima convicción de su deber y con la visión clarísima de su orientación, contra el predominio más indigno, más atentatorio, y más venal de que haya memoria en el mundo.

Ha patentizado constantemente todas las iniquidades, sin vacilación ni modificación alguna en la integridad de sus juicios para juzgarlas, considerando que todos los gobiernos de ese origen, son reos de los mismos delitos, desde que se suceden sin más variación que las agravantes lógicas de todas las desviaciones morales y legales a medida que se acentúan,, como lo enseña la experiencia general y lo evidencia la situación del país.

Dentro de ese régimen funesto y devastador, que nació con el sello del oprobio en su frente y lo llevará hasta la última hora de su terminación, todos los que se solidarizan con él son iguales, sean quienes fueren y vengan de donde vengan, a los efectos de sus inherentes responsabilidades.

Ante la magnitud de los males ocasionados y su prolongación de más de treinta años, las investigaciones hechas por impresiones pasajeras, limitándolas, va a la mínima acción del tiempo como a una sola repartición y a determinadas personas, acusan, cuando menos, incapacidad de concepto sobre el alcance de las verdaderas reparaciones públicas, revelan el escándalo sin las energías y decisiones para aleccionarlo y conjurarlo, o demuestran la falaz y repetida tendencia de establecer diferencias entre gobiernos, que realmente son de absoluta identidad.

Las protestas concordantes con esas investigaciones, se confunden con los procedimientos y arbitrios que en definitiva resultan contraproducentes y siguen retardando las supremas soluciones.

La Unión Cívica Radical que en representación de la opinión pública, ha asumido la magna tarea de la reconstrucción de todo el organismo político de la Nación, ha comprobado reiteradamente la exactitud de las sintéticas opiniones que la mesa directiva deja expuestas.

Termina la nota diciendo, que no obstante, mira con simpatía la iniciativa de ese núcleo de jóvenes en el supuesto de que ellos están incontaminados, no sólo del ambiente de los gobiernos sino también de las agrupaciones políticas militantes, que ya desde esos gobiernos o eliminados de ellos y en aparente resistencia, han perturbado siempre la acción reparadora, exteriorizando perversiones iguales, sino mayores, que la de aquéllos, y pensando, que el convencimiento de la -ineficacia de la acción en esa forma, le marcará su puesto en las filas de la opinión organizadora en pos del honor y de las instituciones de la República.

Fuente: “Ley 12839. Documentos de Hipólito Yrigoyen. Apostolado Cívico – Obra de Gobierno – Defensa ante la Corte”, Talleres Gráficos de la Dirección General de Institutos Penales, Bs. As 1949.-