DEL
GOBERNADOR DE LA PROVINCIA DE SAN JUAN
José Luis Gioja
AL ABRIR LAS SESIONES DE LA CAMARA DE DIPUTADOS
EL 1 DE ABRIL DE 2005
En la Ciudad de San Juan, provincia del mismo nombre, de la República Argentina
Muy bien, muchísimas gracias.
Señor Vicegobernador y Presidente Nato de esta Cámara de Diputados de la Provincia de San Juan, señor Presidente y miembros de la Corte de Justicia de San Juan, señor Intendente de la IV Región de Chile, a usted y a su comitiva muchas gracias por estar; señores Jueces Federales, señor representante del Obispo de San Juan, querido padre José Juan García, señores jefes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad de la Provincia de San Juan, señores legisladores nacionales, señores Ministros del Poder Ejecutivo Provincial, señores intendentes municipales, señores concejales, señoras, señores, sanjuaninos todos.
Antes de comenzar con mi mensaje, en cumplimiento de la Constitución de la Provincia, quisiera que pudiéramos hacer una plegaria y rogar por la salud de un incansable luchador de la paz, como es Juan Pablo II.
Señores legisladores, hace casi 500 días los sanjuaninos comenzamos a encarar el monumental desafío de reconstruir esta bendita tierra. En aquel instante, ni ustedes como representantes del pueblo, ni yo, como nuevo Gobernador, éramos ignorantes de la tarea que se nos exigía y de la responsabilidad que estábamos asumiendo.
Durante los meses anteriores, al fragor de la contienda electoral, la dura realidad provincial había quedado brutalmente expuesta. Una y otra vez, desde todas las posiciones políticas, la gente enfrentaba abrumadoras verdades sobre el difícil estado de la salud, el deterioro de la educación, el devastador desempleo, la ausencia o el estancamiento de las obras públicas, la carencia de un proyecto productivo concreto y viable.
Todos quienes hoy formamos parte de este gobierno lo sabíamos y nadie nos obligó a cargar a nuestras espaldas la tarea de encontrar soluciones. Pero quisimos hacerlo y lo estamos haciendo.
Por fin llegó el momento en que ese mismo pueblo a quien los dirigentes políticos pedimos su voto, decidió en qué proyecto iba a creer. Creo que porque trasuntaba la mancomunión de muchos años de lucha y el esfuerzo de cientos de profesionales en una propuesta dirigida a recuperar el orgullo de ser sanjuanino; ese proyecto fue el nuestro.
De esta forma asumimos el gobierno, y cuando poco más de tres meses después me presenté por primera vez a rendir cuentas al pueblo, y a ustedes, sus representantes, recordé que ese programa profundamente transformador, al que llamamos Segunda Reconstrucción de San Juan, contaba con una particular virtud: el exceder la política partidista y estar de par en par abierto a la contribución de todos los que compartimos una visión común del destino de nuestra gente y nuestra tierra.
Creo que, más allá de las lógicas diferencias, es imprescindible comenzar esta presentación con un claro reconocimiento a la actitud con que nuestros adversarios políticos han jugado su trascendental rol de contrapeso democrático.
Estoy convencido de que el amor por San Juan y el respeto por los sanjuaninos siempre ha estado vivo y presente en este recinto. Por eso, mi agradecimiento sincero a todos aquellos que, desde la oposición pero sin agravios ni injurias, sin resentimientos ni pequeñeces, nos han hecho saber sus disidencias y coincidencias, ayudándonos a reflexionar e incluso, más de una vez, a aceptar otras perspectivas y cambiar decisiones.
En efecto, nadie detenta toda la verdad, aunque detente todo el poder. Mucho menos en una democracia donde el poder se colectiviza, los actores se multiplican y prima la transparencia. Así, sí prevalece la sensatez y el altruismo, mientras unos gobiernan, los otros favorecen la gobernabilidad, aun desde el disenso.
¿Por qué es sano que así ocurra? Porque en democracia todos somos responsables. Más aún cuándo hasta hace muy poco tiempo el país y las provincias vivían momentos de profundo desasosiego, y sobre todo cuando en cada rincón de la patria y la provincia, se levantaban las voces del reclamo justificado, las voces de la desesperanza, las voces de la carencia y del desamparo.
Hoy, cuando ya parece lejano el fervor de la campaña electoral, y gobierno y oposición están sumergidos en la simple realidad del trabajo diario, la apariencia termina por convertirse en humildad y la euforia en determinación. Al menos así lo he sentido yo en estos quinientos días.
Quinientos días en los que no hubo ni uno solo en que no haya recordado que el lugar que ocupamos los funcionarios de gobierno, no es el del abuso y el privilegio, sino el de la exigencia y el esfuerzo. Creo que no somos príncipes herederos sino soldados voluntarios. Y creo, en consecuencia, que no hemos venido a ocupar tronos para dar órdenes, sino puestos de servicio para cumplirlas.
Una y mil veces he dicho que el “Primer Mandatario” no es “el que más manda” sino “el primero en tener que cumplir el mandato”. No lo reitero hoy por simple retórica, sino para tener presente que, si alguna vez cometemos el desgraciado error de sentirnos poderosos por estar aquí adentro, más nos vale recordar que el verdadero soberano está allá afuera.
¿Qué le dijimos en su momento a este soberano para que nos entregara su confianza en el instante más crítico del último medio siglo en nuestro país?
Que había que reconstruir San Juan y que sabíamos hacerlo. Que podíamos hacerlo. Que así como todos y cada uno había sufrido tanto dolor y tanta pérdida, todos y cada uno merecían ser parte de este otro San Juan en el que –ustedes saben- yo siempre he afirmado que nadie sobra, nadie está de más y nadie puede sentirse ajeno.
Así fuimos encendiendo el concepto de la Segunda Reconstrucción de la provincia, mayoritariamente unidos por la convicción de que la única alternativa para no volver al pasado es construir el futuro.
Sin embargo, esas tres palabras –“Construir el Futuro”- no son más que eso: palabras. Y a menos que se tenga la prudencia de usarlas sólo como preámbulo de una poderosa lista de hechos y evidencias, no tienen valor alguno para los cientos de miles de com-provincianos que hoy nos miran exigiéndonos respuestas a sus necesidades y esperanzas, pero especialmente... a sus miedos.
Es así: “Volver al pasado” es una frase que detona miedos profundos, porque las heridas están abiertas y la bronca sigue latiendo en muchos corazones. Pero “Construir el Futuro” provoca miedos igualmente intensos, porque hay tanta ilusión puesta en ello, que el alma de la gente se estremece de solo pensar que no pueda ser cumplido.
¿Será el gobierno capaz de honrar su palabra? ¿Seremos los políticos tan lúcidos como para deponer el enfrentamiento, la vanidad y la ambición?
¿Serán los empresarios audaces, los funcionarios honestos, los maestros perseverantes, los médicos solidarios, los policías intachables, los empleados del Estado diligentes, los perodistas veraces? ¿Seremos los sanjuaninos dignos de un futuro próspero, justo y feliz? ¿Podremos sacarnos de encima décadas de indiferencia y desencanto? ¿Tendremos el coraje de ser de una vez por todas quienes quisiéramos ser?
No hay entre nosotros un profeta al cual seguir a ciegas ni una adivina que vaticine lo que el porvenir quiera depararnos. No tenemos el éxito comprado y no podemos garantizar soluciones infalibles.
Pero existen en esta bendita tierra sanjuanina hombres y mujeres comunes a los que nadie obligó a asumir una tarea gigantesca y de todos modos aceptaron el reto. Hombres y mujeres comunes que, a falta de dones extraordinarios, convocamos a la humildad, a la decencia y al esfuerzo. Hombres y mujeres comunes reunidos solidariamente para intentar que el miedo al futuro se vaya cambiando por certezas. Y esto es, precisamente, lo que hoy quiero y debo compartir con ustedes.
En verdad sería mezquino juzgar el proyecto de la Segunda Reconstrucción por sus resultados en días, semanas o meses, puesto que en buena medida se ha diseñado a partir de la implementación de políticas de Estado, cuyos resultados seguramente, se comprobarán sólo a lo largo del tiempo
En todo caso, quiero ser bien explícito en esto: no vinimos a poner parches ni paños fríos. No vinimos con hilo y aguja a hacer simples remiendos, sino con una topadora para llevarnos por delante décadas de inacción y conformismo.
Nuestro mandato fue y sigue siendo poner en marcha y administrar eficientemente un programa capaz de generar desarrollo económico real, a partir de la reconstrucción del capital provincial. Y esto no es distinto al modelo que estamos viendo consolidarse a nivel nacional bajo el liderazgo del Presidente Kirchner.
Por el contrario, lo que estamos haciendo en San Juan es un ejemplo de aporte que corre en el mismo sentido, con la misma intensidad y el mismo objeto final: una sociedad más justa, más inclusiva, más competitiva y con más oportunidades para todos.
Pero no bastaba, –y no basta- con pensar el San Juan que viene, cuando el San Juan de hoy nos pone de cara a una realidad que no podía ser eludida, ni por un segundo.
Es imposible no dedicarle el esfuerzo más denodado a trabajar sobre la necesidad inmediata y poner remedio a tanta frustración y tanto abandono.
De hecho, más adelante, cuando nos detengamos en cada una de las áreas de acción que ha encarado el gobierno, podremos verificar que gran parte de nuestra dedicación ha estado focalizada en atender las urgencias.
No fue fácil en aquel momento y, no nos equivoquemos, tampoco lo es ahora, en este camino que desde el principio, suponíamos sinuoso y cuesta arriba, lo que hemos corroborado en estos quince meses de gestión, es que no faltaron dificultades.
Más de una vez nos encontramos con toda clase de burocracia y toda clase de burócratas a los que no les importaba nada, excepto mantener sus prebendas y espurias regalías.
Más de una vez descubrimos focos de corrupción, nos enfrentamos a la ineptitud y desidia enquistadas como tumores malignos en la administración estatal.
Más de una vez, tuvimos que ser duros con los que fomentaban la impaciencia, diciendo representar los justos reclamos de la gente, cuando sólo se interesaban por llevar agua a sus propios molinos.
Y pese a las dificultades, pese a que el camino es angosto y empinado, pese a que cargamos con una enorme y tediosa burocracia, no nos detuvimos nunca. Más aun, cuando algunos nos aplaudían anunciando que por fin estábamos viendo el final del camino, nosotros dijimos que apenas estamos comenzándolo.
El propio Presidente Kirchner afirmó que todavía estamos en el infierno y sólo se ha abierto una ventana al purgatorio. Yo lo ratifico, palabra por palabra.
Hay expectativas, es verdad. Hay signos. Hay una sensación en nuestra sociedad de que esta vez las cosas se están haciendo bien, con cordura, mirando el largo plazo y desechando el facilismo.
Y también hay gratificantes ejemplos, en la Argentina y en el San Juan de hoy, que contrastan con aquel país y aquella provincia, que hasta hace muy poco, se encontraban sumidos en las desgracias de un frustrante periodo de paralización del aparato productivo.
Sumado a la aguda desinversión pública y también a un proceso de precarización de la calidad de vida, que llevo a la exclusión del sistema para millones de compatriotas y miles de comprovincianos.
Si quisiéramos marcar la diferencia con ese pasado, que poco a poco vamos abandonando, bastaría decir que, en el año 2005 la inversión en infraestructura de la provincia superará los mil millones de pesos, y gradualmente irá generando miles de nuevos puestos de trabajo.
Habrá que recordar que hay 700 trabajadores haciendo realidad el Dique Caracoles. O ver cómo se van levantando las 8.000 nuevas viviendas planificadas para este año. O en otro orden poder comprobar que no existen más los modestos privilegios que hacían que los funcionarios pudieran gozar de mejores ubicaciones en nuestro Auditórium, en el Teatro Sarmiento o en el Estadio Cerrado.
Advertir como crecieron, de 5 a 36 los proyectos aprobados para Créditos a la Innovación Productiva o Desarrollo Tecnológico.
Las Cooperativas que súbitamente resurgieron, cuando de nueve que apenas funcionaban cuando asumimos, pasaron a cuarenta, en menos de un año. Esto sin contar las Cooperativas de vivienda que son las responsables de la construcción de más de novecientas nuevas casas.
Si quisiéramos marcar la diferencia entre el San Juan de las vacas flacas y el San Juan de la Segunda Reconstrucción, basta con preguntarles a los inversores internacionales.
Yo he tenido la oportunidad de conversar con ellos en países tan lejanos como China o Canadá, o países tan cercanos como Chile.
Más allá de la proximidad o la distancia, los empresarios están volviendo a poner los ojos en el país, un fenómeno de interés y confianza que se evidencia claramente con los 34 Foros, Jornadas y Convenciones comerciales celebrados en nuestra Provincia durante el año pasado.
Hay muchos ejemplos para marcar diferencias y vamos a pasar a revisarlos inmediatamente. Debo decir que, sin duda, el esfuerzo realizado nos causa orgullo, y los resultados obtenidos una justificada satisfacción.
Pero también les advierto, que para este gobierno ninguno de sus primeros logros hace permisible la euforia, porque si ayer estábamos en menos diez, hoy, pese a todo lo avanzado, sólo estamos un poco más cerca del cero.
Creo que las realizaciones del 2004 nos han acercado al Jordán, pero hasta que no estemos a salvo en la orilla del frente, que nadie se congratule de haberlo cruzado.
Cautela es la palabra, mis amigos. Cautela y mucho trabajo.
Veamos a continuación los avances y expectativas de cada Área en particular.
En el Área de Infraestructura, como es lógico y esperable, el interés que despiertan los planes y acciones del gobierno se multiplican, a la vista de un pasado reciente pobre en obras concretadas, como en proyectos. Esto resulta especialmente relevante en tanto la infraestructura es factor clave de desarrollo económico y social.
En este marco, compartimos fervorosamente la decisión política del gobierno nacional, que con distintos planes federales está dedicando a las obras de infraestructura, importantes recursos provenientes del crecimiento de la recaudación impositiva.
Este esfuerzo del Estado, acompañado por inver¬siones productivas del sector privado, permitirá ir consolidando el proceso de recuperación de la economía.
La estrategia que ha enmarcado nuestra gestión durante el año 2004, estuvo orientada básica¬mente a encarar las grandes obras inconclusas, que eran una tarea pendiente reclamada por los sanjuaninos durante muchos años.
En ese sentido, quiero enfatizar que las obras paralizadas ya están en marcha, y el objetivo se está cumpliendo, tal como veremos a continuación.
Para ello, resulta de vital importancia el desarrollo del Plan Estratégico de Infraestructura, un programa maestro de escalonamiento y priorización de obras de infraestructura de corto, mediano y largo plazo.
Mediante una política que maximiza el uso de los recursos existentes, el Plan nos permitirá aumentar el rendimiento y la eficiencia de la inversión pública; promover la participación estratégica del sector privado, y potenciar las actividades de cada zona o distrito de la Provincia, según sus capacidades naturales, sociales, económicas y ambientales.
Seguidamente, analizaré las grandes obras de impacto en el mediano y largo plazo. Estos em¬prendimientos, junto a obras de infraestructura social básica, son los pilares sobre las que esta¬mos cimentando la Segunda Reconstrucción de San Juan.
Agua para riego, energía, caminos, viviendas, hospitales y escuelas, son sin duda pilares de desarrollo, indispensables para la Provincia que recibimos y respuesta urgente para la Reconstrucción que propiciamos.
La construcción del complejo hidroeléctrico Caracoles, significará un mayor control sobre nuestro escaso recurso hídrico y en consecuencia mayor cantidad de hectáreas bajo riego.
La generación energética de la central de pie de presa, contribuirá al abastecimiento eléctrico de la Provincia. Este abastecimiento se verá además consolidado con la construcción de la línea de 500 kilovatios entre Mendoza y San Juan.
La recuperación de los caminos interprovinciales (hacia Mendoza, San Luis y La Rioja), así como la pavimentación y repavimentación de la red de caminos provinciales, entre los que se destacan el camino a Calingasta por la Quebrada de Las Burras, el camino Ischigualasto - Valle Fértil, el camino Tudcum - Pismanta y los puentes de Caucete y Albardón, sobre el río San Juan, impactarán favorablemente sobre la producción y el comercio.
En materia de viviendas, recibimos una pobre herencia.
El enorme déficit habitacional, calculado en cerca de 40.000 viviendas, y una importante cantidad de villas de emergencia o asentamientos irregulares, reclaman una solución urgente.
La falta de financiamiento, junto con otros factores legales, contractuales o empresariales, determinó la existencia de muchas obras paralizadas.
Mirando el balance del período transcurrido hasta ahora, entendemos que si bien no todos los pro¬blemas se han solucionado, hemos avanzado bastante.
Se comenzaron obras que tenían anticipo financiero y se terminaron barrios que hacía mucho tiempo estaban paralizados. En este sentido, el caso de las viviendas de Vallecito, sea tal vez el más emblemático.
Se licitaron, adjudicaron y comenzaron a construir 7 grupos habitacionales, de aproximadamente 50 viviendas cada uno y está en construcción un barrio de 70 nuevas viviendas.
Además en forma paulatina, hemos comenzado con la puesta en marcha de un ambicioso plan de viviendas, a través de varias operatorias nacionales y provinciales, que paliará el enorme déficit habitacional, sobre todo de los sectores más carenciados de la sociedad, generando para muchos sanjuaninos trabajo y salario digno.
Entre estos planes, merecen destacarse el Plan Federal de Construcción de Viviendas. San Juan obtuvo un cupo histórico de 5000 unidades habitacionales. De este cupo, ya se ha firmado contrato con distintas empresas por una cantidad de 2119 viviendas y se han licitado además, 67 barrios en todos los Departamentos de la Provincia, que suman 2881 viviendas más.
Ya se ha efectuado la apertura de ofertas y están ahora en proceso de adjudicación.
Con respecto al Plan Federal de Emergencia Habitacional, que prevé la construcción de 911 viviendas, por 114 cooperativas de trabajo, se ha comenzado y está avanzada la construcción en los distintos Departamentos de San Juan.
Con relación a las viviendas pendientes del Lote Hogar, ya se ha conseguido por parte del Gobierno Nacional, la “No Objeción” para licitar la terminación de 2200 casas. En este cupo se encuentran las viviendas no terminadas, como así también las que serán licitadas próximamente.
La construcción del nuevo Hospital Rawson hasta su terminación esta garantizada. Al igual que otros centros periféricos de atención primaria de salud en construcción. Todo esto mejorará sensiblemente la infraestructura médico hospitalaria.
Un párrafo aparte merece la construcción del Centro Cívico, la obra pública inconclusa por antonomasia de la Provincia de San Juan.
Esta obra, que comenzó a construirse hace más de treinta años y que lleva más de 23 años paralizada, se había constituido en un símbolo de frustración, desidia e indolencia que viene impactando en la conciencia colectiva de los sanjuaninos y deteriorando la confianza como pueblo, para con¬cluir las grandes obras públicas.
Con el apoyo de la Nación, y con recursos propios provenientes de la venta de los edificios públicos que se desocupen, vamos a financiar la construcción del Centro Cívico.
La obra se encuentra en pleno proceso licitatorio, y la apertura de pliegos está prevista para el día 26 del presente mes. Esperamos comenzar la construcción a mediados de año.
Respecto del Túnel de Baja altura por el Paso de Agua Negra, tal vez la obra pública más importante para San Juan en los últimos tiempos, estamos avanzando paso a paso.
La conclusión del Estudio de Prefactibilidad Técnica, y la realización actualmente del estudio de Factibilidad Económico Social, encarados ambos juntamente con nuestros hermanos chilenos, reflejan avances concretos.
A partir del apoyo explícito de los gobiernos centrales de Chile y Argentina, se puede acreditar la voluntad política de ambas Naciones en la construcción de esta obra.
Nuestro próximo paso, es la realización del Proyecto de Ingeniería de detalle. Para solventar los costos que demande, tenemos comprometido el apoyo del Gobierno Nacional y de Empresas y Corporaciones de la Republica Popular China.
Creemos que el marco general es favorable, y con moderado optimismo esperamos concretar este largo anhelo para sanjuaninos y chilenos.
Además de estos emprendimientos, se efectuaron otras realizaciones como obras hídricas, suministro de agua potable a zonas aisladas, como Marayes y El Encón, saneamiento ambiental de recuperación de espacios verdes, avances en áreas como telecomunicaciones, tránsito y transporte, entre otras.
Paralelamente a las obras propiamente dichas, hemos tratado de cambiar estructuralmente algunas situaciones preexistentes, así como la funcionalidad de algunas reparticiones del Área de Infraestructura.
En este marco, se inscribe la Ley de Tránsito y Transporte recientemente aprobada, que pretende normalizar el servicio sobre la base de preservar la calidad y seguridad de las prestaciones y de mantener un equilibrio entre los distintos sectores involucrados.
Por otro lado, este Poder Legislativo sancionó a nuestro requerimiento, la Ley de Creación del Ente Autárquico Ischigualasto, que está orientada a potenciar y preservar el patrimonio geológico y paleontológico que posee nuestro Valle de la Luna, asegurando que los recursos generados en el Parque sean totalmente reinvertidos en el mismo.
Señoras y Señores Diputados también ustedes aprobaron la Ley “Vivienda Digna Techo Seguro”, que da al Ejecutivo las herramientas necesarias para agilizar el proceso de construcción de viviendas.
También se ha elaborado, y remitido a este Parlamento, el Proyecto de Modificación de la Ley del Lote Hogar, que refuncionaliza dicho organismo, para hacerlo más adecuado al fin propuesto.
En el rubro energético, se creo por Ley el EPSE, (Energía Provincial Sociedad del Estado). Empresa que tiene a su cargo la administración de todas las centrales estatales de generación de energía existentes y futuras.
En tal sentido, se están desarrollando todas las tareas necesarias para la búsqueda de los tan necesitados recursos hidro-carburíferos y estoy seguro que Dios nos va a ayudar.
Se ha elaborado también, un proyecto de Ley para la reformulación de la Dirección de Arquitectura. Esta Ley tiene por objeto hacer una repartición más ágil, para que pueda dar respuesta adecuada a los requerimientos en materia de obra pública que en el futuro le sean requeridos.
Las obras concluidas durante el 2004, las grandes obras encauzadas y los cambios estructurales efectuados, constituyen un balance a nuestro juicio muy positivo.
En el Área de Hacienda, hace un año expresamos a esta Cámara, que la situación a Diciembre de 2003, era particularmente grave. Hoy, se puede afirmar que la Provincia ha mejorado cautelosa pero permanentemente.
De continuar por este camino, los sanjuaninos podremos enfrentar un 2005 no sólo sin sobresaltos, sino comenzando a ver soluciones concretas a los múltiples problemas que nos afectan desde hace mucho tiempo.
Pero revisemos los distintos cursos de acción que nos permiten corroborar estas afirmaciones.
En primer lugar, destaquemos que los Recursos de Origen Nacional por Coparticipación Federal, superaron en un 41 por ciento la propia estimación que hizo la Nación. Esto es fruto del nivel de crecimiento de la actividad económica y una mayor capacidad recaudatoria de la AFIP.
Por las mismas causas, los recursos de origen provincial, también crecieron significativamente respecto al 2003.
Durante el 2004, la recaudación sanjuanina creció un 32,9 por ciento por sobre la recaudación del año anterior.
Destaco la notable recaudación impositiva que ha logrado la Dirección General de Rentas, a partir de acciones como:
el comienzo del trabajo en línea en varias delegaciones;un mayor seguimiento y control a los contribuyentes;la justa intimación de deudas para evitar su prescripción;y el gran esfuerzo por disminuir los altos índices de morosidad, aún hoy elevados.
En términos generales, en el 2004 no incrementamos ni los avalúos, ni las alícuotas de nuestros impuestos. Asimismo, a comienzos de nuestra gestión prorrogamos por un período adecuado el régimen de moratoria que estaba en vigencia desde hacía años en la Provincia. Vencido el plazo, el régimen cesó.
En verdad, la moratoria casi siempre se justifica en situaciones excepcionales, pero invariablemente termina por alentar la falta de cumplimiento, generando injusticia y desazón en los cumplidores.
Venimos de un Estado que pagaba mucho, siempre fuera de término y que cobraba poco, también fuera de término. En ese Estado el régimen de moratoria se convirtió en la regla. Nuestro propósito es no reincidir.
Por eso, hoy no tenemos moratoria, pero sí tenemos, en forma permanente, un régimen de facilidades de pago, que posibilita a los contribuyentes con vocación de cumplimiento, y que atraviesan dificultades temporarias, ponerse al día con sus obligaciones.
Respecto a nuestra conducta en torno al gasto, tal como anticipamos en el 2004, reafirmo que austeridad, transparencia y eficiencia son los preceptos fundamentales bajo los cuales se ha conducido y se conducirá nuestra administración.
Durante todo el año pasado, hemos pagado nuestras obligaciones en tiempo y forma a proveedores de bienes y servicios, a contratistas de obra y por supuesto a nuestros empleados.
Igualmente hemos cancelado las deudas que tenía el Estado con el sector Docente y con la Obra Social de la Provincia.
Durante el 2004, el Estado Provincial hizo un esfuerzo significativo y actualizó razonable y responsablemente los sueldos de sus agentes.
Asumimos que no faltarán los insatisfechos, pero por cierto el esfuerzo debió equilibrar dichos aumentos con la puntualidad de los pagos, sin afectar por otra parte, la calidad y cantidad de los servicios a que estamos obligados con todos los sanjuaninos, sean o no empleados estatales.
En San Juan, con orgullo, podemos decir que el pago de sueldos a empleados y agentes del Estado Provincial dejo de ser una novedad, para convertirse en regla. Hoy se paga puntualmente, y conforme a la Ley.
También en el 2004, y como corresponde, cumplimos acabadamente con las transferencias a Municipios que se votaron en la Ley de Presupuesto. Es más, cumplimos también con transferencias comprometidas y legisladas en el 2003 y que no habían sido efectivizadas.
En el ámbito del Planeamiento, reactivamos programas que con financiamiento internacional hasta el momento estaban detenidos y con alto grado de incumplimiento provincial.
Por otra parte, respecto a la Caja de Acción Social, cabe mencionar que desarrolló una importante labor, superando el monto total prestado en el 2003 en un 255 por ciento más.
Sin duda, el resultado de la gestión 2004 ha generado ahorros que, sumados a los recursos con que esperamos contar en el 2005, nos permitirán enfrentar un año que entendemos puede ser promisorio.
De hecho, el Presupuesto 2005 incluye un importante incremento en las inversiones y prestación de servicios esenciales del Estado Provincial, lo que se evidencia en el fuerte aumento que habrá este año en las transferencias a Municipios y en el hecho crucial de que por primera vez en muchos años, esperamos asumir los compromisos con nuestros propios recursos, sin asistencia financiera de la Nación para amortizar su deuda.
En el Área Educación En el año 2004 tuvimos la responsabilidad de asistir a los requerimientos educativos de 190.000 alumnos en los distintos niveles y modalidades del sistema.
Para dar respuesta a los mismos encaramos, a partir de ese momento y lo continuamos en el año 2005, una tarea que abarca tres dimensiones: la Pedagógica, la de Recursos Materiales y Didácticos para el trabajo en las instituciones educativas, y la Administrativo – Financiera.
Desde el punto de vista pedagógico, el Calendario Escolar para el año 2004, permitió el desarrollo de 180 días de clases para Nivel Inicial, EGB, Polimodal, Educación Primaria de Adultos y Educación Media de Adultos de gestión estatal y privada.
El logro de este objetivo coloca a la Provincia de San Juan entre las pocas de la República que dieron cumplimiento a la Ley Nacional N° 25.864.
Nuestra aspiración es dar cumplimiento a este objetivo, en el ciclo lectivo 2005, para ello debió adaptarse el cronograma inicial una vez superado el conflicto docente.
Este Gobierno desea, que la educación en nuestra provincia mejore en la calidad de sus resultados. En este sentido, compartimos con toda la sociedad la preocupación de:
¿Qué aprenden nuestros alumnos en la escuela? y ;¿Cómo la escuela evalúa y califica esos aprendizajes?
No podemos permitir que nuestros niños asistan a las escuelas sin confianza en sus propias posibilidades de aprendizaje, y en los resultados del proceso educativo.
Atendiendo a esta preocupación, se están revisando los contenidos de la enseñanza, modificando las pautas de evaluación, acreditación y promoción.
De igual manera se están desarrollando programas y proyectos de mejoramiento de la Educación Rural, Técnica y Agropecuaria, porque debemos educar para la vida y para el trabajo.
En este marco, se implementan varios programas y proyectos, como lo son el análisis y reformulación de los diseños curriculares, los vinculados con la actividad agrícola, con la motivación por la lectura, como fuente de recreación e información, entre otros.
Tenemos claro que, los conceptos de justicia y equidad no se agotan con la atención a la calidad del servicio educativo, sino, que deben sustentarse en una extensión de sus beneficios a todos los niños, jóvenes y adultos, cualquiera sea su condición y vivan donde vivan.
El acompañamiento, en el trayecto formativo de los alumnos, con dificultades económicas, que los ponen en riesgo de fracaso y deserción, forman parte del objetivo de una escuela para todos.
Como así también el acceso al sistema educativo de quienes nunca asistieron a la escuela y la reinserción de quienes, por distintas circunstancias, vieron interrumpidos sus estudios.
Es por ello, que el Gobierno viene desarrollando diversas actividades, como es, la terminalidad de EGB 3 para jóvenes y adultos dentro del Plan Jefes de Hogar, la asistencia educacional en el ámbito penitenciario, un programa nacional de becas estudiantiles, creación de institutos técnicos superiores no universitarios para ampliar la oferta educativa, orientada a la producción y los servicios.
Destacamos la labor cumplida para el desarrollo del turismo escolar, que posibilitó que más de mil estudiantes sanjuaninos disfrutaron de vacaciones en colonias nacionales, de Chapadmalal y Río Tercero y que más de cinco mil lo hicieran en colonias de verano en distintos lugares de la Provincia.
Todas las actividades mencionadas se corresponden con el impulso que nuestro Gobierno pretende dar a la educación en la Provincia.
En tal sentido, merecen destacarse también los más de 200 proyectos específicos que son desarrollados por los organismos dependientes del Ministerio de Educación y por las instituciones educativas, y están destinadas a capacitar a los docentes y a mejorar las prácticas institucionales en el aula.
Estos esfuerzos, representan una búsqueda constante por mejorar los recursos humanos, pedagógicos y materiales, para alcanzar una escuela activa, que favorezca el desarrollo de todas las potencialidades de nuestros niños y jóvenes.
Durante décadas, la escuela argentina, demostró a la sociedad que con los escasos recursos del pizarrón y la tiza, podía operar sobre los aprendizajes de alumnos, que a través de ellos se integraban a la cultura nacional.
Sin embargo los tiempos actuales nos enfrentan al desafío de nuevas y complejas tecnologías que nuestros alumnos deberán dominar para incorporarse a los modos de relación laboral y social que demanda el nuevo siglo.
Sobre los recursos materiales y didácticos para el trabajo en las instituciones educativas, estamos convencidos que la educación sólo puede asegurarse si se le brinda un soporte de recursos indispensables que le permitan desarrollarse en condiciones de equidad.
Por ello, hemos realizado grandes esfuerzos en las tareas de refacción y construcción de edificios escolares, en la distribución de útiles y material didáctico, en la provisión de equipamiento para escuelas albergues, y en otorgar subsidios a las Escuelas Agrotécnicas.
Todo esto, contó con la colaboración permanente del Ministerio de Educación de la Nación, lugar desde donde se obtuvieron aportes que beneficiaron al sistema educativo Provincial.
En este sentido, las líneas de acción desarrolladas en el año 2004 y que continúan en el 2005, son: el FONDO ROTATORIO DE EMERGENCIAS, el PROGRAMA DE REFUNCIONALIZACIÓN DE EDIFICIOS ESCOLARES, y el PROGRAMA NACIONAL DE CONSTRUCCION DE ESCUELAS.
Estos Planes durante el presente año, nos permite avanzar en la construcción de dieciséis nuevos edificios escolares en toda la Provincia, haciendo notar que seis de ellos lo ocuparán escuelas de educación especial.
El fortalecimiento de la educación media, implica actuar sobre las condiciones de desigualdad educativa existentes, en el nivel anterior de escolaridad.
Por ello será necesario también fortalecer tanto en lo pedagógico como en lo edilicio a los establecimientos de EGB 1, 2 y 3, que atiendan a los alumnos en condiciones de mayor pobreza, para mejorar sus trayectorias educativas durante los primeros nueve años de escolaridad, alcanzando por una parte, altas tasas de egreso en tiempos adecuados y, por otra, alentando la promoción al Nivel Medio y/o Polimodal de esta población.
En cuanto a lo Administrativo- Financiero la reorganización paulatina del sistema educativo es el resultado de una búsqueda permanente de consenso entre todos los actores. Como ejemplo, señalamos la paritaria docente. Actividad importante en la medida que permite generar acuerdos con los sectores representativos del estamento docente.
Esto no hubiese sido suficiente, si no hubiéramos atendido a problemas crónicos que entorpecían el funcionamiento del sistema, entre los que podemos mencionar:
El Pago de la deuda docente “histórica”, en un 98 por ciento;
El Reordenamiento del proceso administrativo de designaciones de docentes suplentes;
Y la Reformulación del proceso administrativo del servicio de Comedores Escolares, Albergues y Refrigerio a las Escuelas, entre otros.
En el Área de DESARROLLO HUMANO: Entendemos a la problemática social como la resultante de las múltiples acciones que llevan adelante los distintos sectores de la sociedad.
El Estado, actor principal, debe velar por el cumplimiento de los derechos de toda la comunidad y por esto en nuestra gestión acentuamos su accionar en los más desprotegidos, los más vulnerables; el niño, el adolescente, el discapacitado, el anciano, el desempleado; es decir, el que requiere de una mayor presencia del Estado para alcanzar una mejor calidad de vida.
En el 2005 seguiremos construyendo la red provincial de políticas sociales, junto con los municipios y las organizaciones de la sociedad, entendiendo que estos deben ser protagonistas activos y principales, en la búsqueda de soluciones a los problemas que plantea su comunidad.
Un Estado que genera políticas sociales participativas, garantiza transparencia. Un Estado que asegura continuidad de planes y programas, garantiza mayores posibilidades de desarrollo.
Hoy, hacer políticas sociales es dar oportunidades para el trabajo, para la salud, para la educación y la cultura, para la recreación y el deporte; en definitiva es generar oportunidades para los que más necesitan y menos tienen.
En el presente período, desde el Ministerio de Desarrollo Humano y Promoción Social, seguiremos priorizando temas centrales que involucran a la familia y a cada uno de sus integrantes; aprovechando al deporte, la recreación y la cultura como herramientas de promoción social, para que a partir de ellas, se logre un desarrollo justo y equilibrado en toda la comunidad.
Daremos continuidad a planes como: “Fortalecimiento de la familia”; “Inclusión social de las personas con capacidades especiales”; “Protección integral a la niñez y adolescencia”.
Este último dio la posibilidad, entre otras cosas –y quiero resaltarlo- que durante el año 2004, recibieron apoyo escolar 1800 niños de sectores vulnerables, con la participación de 247 ciudadanos voluntarios.
Se atendieran 580 casos de prevención de violencia; se creó el servicio de adolescencia dando apoyo para que concluyeran sus estudios unos 300 jóvenes sanjuaninos considerados dentro de la franja de mayor riesgo.
Dimos un paso cualitativo trabajando en la focalización de los programas alimentarios, asistiendo a los que más necesitan. Volcamos los recursos a un sistema más transparente y justo, donde se prioriza la erradicación de la desnutrición –especialmente la infantil- y volver a comer en familia.
Incrementamos nuestros esfuerzos en la generación de alternativas laborales reales, como el autoempleo apoyando a los pequeños emprendedores existentes, e incentivamos la conformación de otros.
Aprovecharemos al máximo, con sentido social, las fuentes de financiación nacional existente. Como ejemplo de ello, se crearon cuatrocientos talleres comunitarios que son beneficiados por la implementación de programas sociales de carácter nacional y provincial, y trescientos setenta proyectos seleccionados de emprendimientos productivos unipersonales, por un monto que supera los quinientos cincuenta mil pesos.
Están en evaluación, según el Convenio marco Municipio-Nación, quinientos proyectos, por un monto de seis millones ochocientos mil pesos; que alcanzará a mil quinientos beneficiarios directos y a otros seis mil de manera indirecta.
Seguiremos re-entrenando para el empleo a la población desocupada, con el objetivo de satisfacer el requerimiento de mano de obra calificada, que hoy reclama la producción y la obra pública. Entendiendo al desempleo como el factor de mayor relevancia que origina la situación social actual.
Continuaremos trabajando en el rescate y puesta en valor de nuestra identidad cultural, apoyaremos las diversas formas de expresión cultural; la danza, el canto, la música, la literatura, la pintura, la artesanía, etc.; entendiendo que esto no solo ayudará al desarrollo de nuestros artistas, sino también a la inserción de nuestra provincia en el concierto nacional.
Prueba de ello son, y lo destacamos con orgullo, la distinción que han obtenido artistas sanjuaninos en importantes certámenes nacionales.
En deportes y recreación, repetiremos experiencias exitosas como la de: “Escuelas de iniciación deportiva” para 2500 chicos; los “Juegos Inter-escolares e Inter-colegiales” para 9500 niños, las “Colonias de vacaciones”; y los “Torneos Evita”.
De este último tendremos el orgullo de ser sede de las finales nacionales en el mes de Octubre. Llegaran a la provincia más de 3000 competidores; deberemos prepararnos muy bien para que sea una verdadera fiesta como quieren todos los sanjuaninos y merecen los chicos que compitan.
En el Área de Gobierno, queremos destacar primordialmente los esfuerzos que estamos realizando en materia de Seguridad y que estamos convencidos que no alcanzan.
En convenio con la Universidad Nacional de San Juan, se coordinó el proyecto de creación de la carrera universitaria “Licenciatura en Seguridad Pública” para el personal Superior de la Policía de San Juan.
Se confeccionó y aprobó el proyecto de incremento presupuestario para el ejercicio 2003, a fin de crear 250 cargos destinados a planta funcional de Policía y Servicio Penitenciario.
Impulsamos también, un programa de recursos e inversiones para equipamiento integral de la Policía de San Juan, que abarca desde la adquisición de cuarenta nuevos vehículos policiales, hasta el reequipamiento del cuerpo de bomberos.
Asimismo, para terminar con problemas edilicios de antigua data, se asignaron recursos a múltiples obras de refacción de comisarías, construcción de nuevos pabellones penitenciarios, talleres de laborterapia, microhospital y sistemas de vigilancia y control en las instalaciones penales.
Adicionalmente, con aporte Nacional se comenzará la construcción de un complejo con especificidades de máxima seguridad con capacidad para 180 internos.
Estamos convencidos de que, el haber potenciado nuestro esfuerzo en Seguridad con recursos en equipamiento y personal, está obteniendo resultados: la Provincia ha experimentado una alentadora disminución de hechos delictivos en general y específicamente en Robos y Hurtos, conforme lo reflejan los cuadros estadísticos y comparativos, siendo muy conscientes que es mucho lo que queda por hacer, a lo que dedicaremos ingentes esfuerzos.
En el ámbito de Justicia, se enfatizó el concepto que el Estado debe estar al servicio de los ciudadanos de una forma cada vez más personalizada y acuciosa.
Un claro ejemplo de ello, es la participación y desarrollo de acciones conjuntas con la Secretaria de Servicios Públicos, en el Desarrollo del Programa Provincial de Planificación y Seguridad Vial, sobresaliendo la declaración de ésta como una Política de Estado.
Destacamos asimismo, la participación en Seminarios para la Transparencia y Control de la Corrupción, entendiendo que el camino no es andar declamando nuestras convicciones, sino hacerlas manifiestas, a través del repudio, el combate y el castigo ejemplar.
Paralelamente, este año ha sido particularmente intenso en el ámbito de los Derechos Humanos, con especial énfasis en los Derechos de los Niños y Adolescentes. Creemos que, por primera vez, la Provincia de San Juan comienza a materializar una política de fondo en esta sensible materia.
En otro orden, quiero puntualizar el notable trabajo del Registro Civil, en la remisión de más de 30.000 Documentos de Identidad adeudados de los años 2002 y 2003, además de la entrega normal de los tramitados en el año 2004.
Como resultado de la campaña de identificación de menores de hasta 10 años, se logró la inscripción de menores, indocumentados, incrementando en un 20 por ciento el total de las registraciones del año anterior.
Quiero hacer un especial paréntesis para referirme a la labor del Consejo Provincial de Prevención, porque mientras todas las Provincias del País se debaten todavía en la problemática de la diversión nocturna, nuestro Gobierno desde mayo del 2004, viene trabajando diligentemente sobre los riesgos que pueden derivar de las desviaciones en la diversión nocturna.
Esta anticipación no fue en vano, gracias a la misma, hubo una sustancial disminución de accidentes o hechos de violencia en este verano 2004-2005. Por ello, quiero agradecer tanto al Consejo, como a los Jueces de Falta de la Provincia y a esta Cámara de Diputados por la sanción de la Ley 7575.
En el Área de Salud, durante años, fue constantemente vapuleada por todos los sectores de opinión, incluyendo el más determinante: la opinión pública. No les faltó razón.
Cuando asumimos el Gobierno sabíamos que la Salud Pública Provincial alcanzaba un estado crítico en muchas de sus prestaciones, agravado ello por un manejo ineficiente, desordenado e incluso con muchas sospechas de corrupción.
Pero sabíamos también que, existían muchos profesionales capaces, honrados y solidarios, dispuestos a sumarse a una cruzada urgente para devolverle a San Juan la Salud Pública que necesitaba, y aun necesita.
Por eso, al comenzar, sin olvidar la situación pasada, decidimos desarrollar un extenso programa para ganar en eficiencia y transparencia en la gestión.
Con esta acción inicial, se buscó fortalecer al máximo posible el control interno y la revisión de procedimientos de compra, objetivos que se han venido logrando gradualmente y muestra un notable avance en estos últimos meses.
Asimismo, se efectivizaron los pagos de deudas atrasadas y demoradas que corresponden a servicios esenciales de los años 2001, 2002 y 2003. Asegurando por fin la continuidad y mejora de los mismos.
Se elaboró también el proyecto de Descentralización y Autarquía de Centros Asistenciales de la Provincia, que fue por ustedes convertido en Ley en el año 2004, y que permitirá, a partir de su implementación, la efectiva descentralización operativa y recuperación de costos hospitalarios.
Dicen que: “una imagen vale más que mil palabras”. En este momento, para dimensionar la monumental carga que pesa sobre los servicios públicos de salud, yo creo que las cifras valen más que las explicaciones.
En los últimos doce meses, estos servicios se incrementaron notablemente por sobre las prestaciones llevadas a cabo en años anteriores.
Las tres Unidades Sanitarias Móviles brindaron servicios de atención médica en distintas localidades de la Provincia, sobre todo en aquellos lugares donde la población tiene mayores dificultades para acceder a la atención médica.
Para hacer frente a esta enorme actividad, en el año 2004 se ha invertido en este sector, un 55 por ciento más que el año anterior.
Por otra parte, se adquirió equipamiento de odontología y especifico para los laboratorios de análisis clínicos del Hospital de Angaco, del Centro de Salud Monseñor Di Stéfano, y los Microhospitales de San Martín y Villa El Salvador en Chimbas, que están próximos a inaugurase.
Se aseguró la provisión de medicamentos, insumos y aparatología médica en Hospitales y puestos sanitarios de toda la Provincia, propendiéndose a lograr la colaboración del propio público en cuanto a constatar la existencia adecuada y permanente de estos elementos de los consultorios.
En lo referente a las acciones encaradas por la Obra Social de la Provincia, se trazaron lineamientos claros y precisos tendientes a optimizar el gasto, y a brindarles la mayor cobertura posible a los afiliados.
Durante este año, se suscribieron convenios prestacionales en las áreas médicas, paramédicas, odontológicas, de Diagnóstico y Tratamientos de Alta Complejidad y Farmacéuticas.
En paralelo al trabajo diario de prestaciones médicas, nos ocupamos también de obras vitales de cara al futuro.
Me refiero a la creación del Instituto Provincial de Hemoterapia, del Vacunatorio Provincial en calle Entre Ríos, del Centro de Salud Monseñor Di Stéfano y del nuevo Banco de Drogas Oncológicas en el Hospital Marcial Quiroga.
Todo ello, además de decenas de inauguraciones de consultorios y puestos sanitarios, reparaciones y acondicionamientos de innumerables servicios que permanecían en un dramático estado de postración y abandono, tareas que los invito a conocer pormenorizadamente en el Anexo adjunto.
Pasemos al Área de Producción: Es tal vez la materia que al respecto más quisiera hablar, porque será sin duda objeto de nuestros mejores esfuerzos durante el periodo que iniciamos.
El camino elegido fue arduo pero provechoso. Conscientes de la realidad provincial que nos obligaba a encarar el ambicioso proyecto de convencer a cada comprovinciano, que se podía resurgir si eran capaces de transitar un camino juntos.
Había que poner empeño, porque valía la pena. Y a nuestros equipos, motivarlos para que no dejen de trabajar un solo minuto. San Juan se merece otro destino. Nosotros aspiramos a ello.
Transcurrido un año podemos decir que el ataque a la desidia, muestra sus primeros resultados. Por fin desde Albardón empezaron a salir las primeras galletitas que los esperanzados sanjuaninos veíamos producir en la postergada fábrica inmovilizada por más de treinta años.
Luego enviadas a todo el país y exportadas hacia Angola y otros mercados del mundo.
Los productos como el vino, el aceite de oliva, el ajo, el mosto, las frutas frescas, las frutas desecadas, las semillas, la minería, el turismo, entre otros, por sus calidades y características, nos han llevado a focalizar esfuerzos para trabajar en su desarrollo, ya que contamos con ponderables ventajas competitivas.
Hemos logrado avances claramente palpables aún cuando esperamos mejorar sensiblemente en el futuro.
El programa Calidad San Juan, que hemos encarado, esta en pleno proceso de formulación, y en pocos días recibiremos la primera misión del BID a estos fines. Durante este año esperamos lograr su aprobación y los primeros desembolsos.
Este programa concebido como un plan maestro y transformador, y por tanto de largo aliento, admite la implementación de sub-programas para atender acciones de corto plazo.
En esta intención estamos impulsando el sub-programa: GRUPOS PRODUCTIVOS, que tiene como metas la inserción de jóvenes profesionales a la economía real, y apunta a fomentar el asociativismo entre nuestros emprendedores para potenciar las posibilidades de compra, investigación y crecimiento.
Y también a la comercialización, cuestión esta que ha estado desatendida por las políticas de estado, y que hoy es imprescindible para que nuestra producción se pueda colocar en los mercados nacionales e internacionales.
Más de diez grupos productivos ya están funcionando con verdaderos avances, algunos de los cuales ya han realizado sus primeras exportaciones. Más de setenta emprendedores ya han apostado su esfuerzo a esta posibilidad.
Nos propusimos generar un ambiente atrayente para los negocios entre particulares en la provincia, como una manera de captar inversiones para San Juan. Con tal motivo organizamos importantes misiones al exterior, y propiciamos más de treinta eventos en San Juan y otras provincias argentinas.
Por que creemos firmemente que el éxito comercial de la Provincia debe ser un camino sin retorno, convocamos a todos los hombres y mujeres emprendedores de San Juan a alumbrar juntos la imagen positiva de una Provincia abierta al país y al mundo.
San Juan se va a incorporar a las grandes ligas no solo para crecer, si no para no ausentarse más.
Mientras en el año 2003 las exportaciones sanjuaninas crecían un 4%, los esfuerzos, la planificación, la determinación inquebrantable de generar una verdadera revolución productiva nos ha llevado a aumentar nuestros envíos en un 35%.
Debemos prepararnos para los tiempos que vienen. De la mano de las exportaciones viene el crecimiento, y con ello la generación de empleo con condiciones dignas, salarios justos y desarrollo para todos.
Esta apuesta al crecimiento se manifiesta durante el año pasado con el 11.3 por ciento del crecimiento del producto geográfico en la Provincia.
El 9 por ciento con que el país se instaló como uno de los que más crecieron en el mundo en forma sostenida, fue superado por esta humilde San Juan, que alcanzó un 2.3 por ciento por encima de la media nacional.
También el año pasado, se crearon más de cinco mil empleos genuinos en esta Provincia, logrando dos puntos menos que la Nación entre los porcentajes que miden la desocupación.
Todo esto es bueno, pero no es suficiente, sabemos que hay que redoblar los esfuerzos para que cada sanjuanino tenga un trabajo genuino, digno y permanente y que la provincia se encamine hacia su destino de grandeza.
Para ello, necesitamos la comprensión y el apoyo de los esforzados productores, industriales, comerciantes, técnicos, profesionales y todos aquellos quienes aspiran al San Juan soñado.
En cuanto a la vitivinicultura, acordamos con Mendoza una política común, fijando un porcentaje de uva destinado a mosto, en un valor considerado el más alto de la historia.
Los precios que vienen registrándose para pasas, uvas varietales y uvas de mesa, son excepcionales y las uvas genéricas están alcanzando un precio razonable.
Merece nuestra atención el descenso del consumo de vinos de baja gama en el país, que según los cálculos ha pasado de 90 a 30 litros por capita por año.
El Plan Estratégico Vitivinícola, cuya ley de creación impulsé como legislador deberá ocuparse especialmente de este tema, y fomentar el consumo conforme corresponde al objetivo de este Plan Estratégico Vitivinícola.
Este plan constituido por representantes de los gobiernos y sectores productivos de San Juan, Mendoza y La Rioja y otras provincias productoras, ya esta conformado, y realizó su primer reunión de trabajo operativo en nuestra Provincia.
Se han hecho los aportes dinerarios, comprometidos en calidad de préstamo, para que se activen en forma inmediata las acciones necesarias, tendientes a la promoción de productos vitícolas.
Hemos mantenido la herramienta de crédito fiscal por fraccionamiento en origen, beneficiando a catorce establecimientos promocionados.
Una bodega muy importante del departamento San Martín, esta regresando a la provincia para retomar las líneas de fraccionamiento que nunca debimos perder y que años atrás había dejado, para establecerse en la vecina Mendoza.
Otras bodegas de pequeña y mediana capacidad, también esperan producir vinos varietales en San Juan. Todas ellas creyeron en nuestras posibilidades y se suman al futuro de la provincia.
En el campo olivícola, hemos lanzado el estudio y formulación del Plan Estratégico Argentino, con el objetivo de diseñar políticas activas que contemplen la participación de todos los actores de esta cadena de valor productiva. San Juan debe liderar este proceso.
En el tema energético y debido a la falta de inversión, el país debió soportar problemas en cuanto a la provisión de gas y otros fluidos para el funcionamiento de sus industrias.
Por ello, y para evitar la paralización de nuestras industrias, firmamos un acuerdo transitorio con la Secretaria de Energía de la Nación, la Secretaria de Minería de la Nación, Repsol, la Central Térmica Mendoza y el Gobierno de la vecina Provincia, para la provisión de ciento veinticinco mil metros cúbicos de gas natural para San Juan.
En similares términos y con mucha anticipación se ha trabajado para prevenir durante este año la eventual falta de carbón y/o gas.
En el área de Agricultura, se encuentra en pleno funcionamiento la Entidad de Programación y Desarrollo Agropecuario, donde a partir del PROSAP se ha formulado y evaluado el proyecto de recrecimiento del Canal del Norte, primer tramo Albardón – Angaco – San Martín – Caucete.
En Sanidad Vegetal, el programa de control y erradicación de la mosca de los frutos, logró avances significativos en este año en los valles de Ullúm, Zonda y Calingasta.
La caída de moscas silvestres mantiene a la fecha buenos índices por primera vez en la temporada; lo que ha permitido a productores de estos valles, requerir la solicitud de tránsito libre por Chile.
La Sanidad Vegetal es política de estado para mi Gobierno, y continuarán los programas para alcanzar la calificación de baja prevalencia, en consonancia con los programas de toda la región, para asegurar el envío de nuestras producciones a los mercados del mundo.
En semillas, donde San Juan, tiene también que liderar un proceso de desarrollo nacional, y a partir de la descentralización del Instituto Nacional de Semillas, se logró la instalación en la Provincia de la Delegación Regional del Nuevo Cuyo, dejando inaugurada en noviembre del 2004, las oficinas de la misma.
En cuanto a política forestal, se han reactivado los viveros de Chimbas y Ullúm, para realizar la provisión de plantas a los forestadores que adhieran a la Ley 25.080.
En relación con la necesidad de agregar valor a nuestras producciones, hemos previsto durante este año, la construcción de un frigorífico para la fruta en fresco, especialmente uvas, donde San Juan es el principal exportador.
También se hicieron inversiones en galpones y maquinaria para empaque de ajos, principalmente para zonas como Tamberías en Calingasta y el Departamento Pocito.
Asimismo, está en su etapa de elaboración final un plan de estímulo para la instalación de secaderos de uvas y tomates.
Productos estos, donde San Juan tiene condiciones climáticas excepcionales, y que permitirán al productor, además de agregar valor, mejorando sus condiciones de precios y competitividad, elegir los momentos de su comercialización y defender mejor su producción, como paso previo al acceso directo a los mercados.
Durante el año 2004, y a través de una política de subsidio de tasas con recursos provinciales, y cupos de la Subsecretaría Pyme de la Nación, pusimos al alcance de nuestros productores créditos para la compra de bienes de capital, con tasas de solo 3% anual en Pesos.
Logramos también notorios adelantos en Ciencia y Técnica, donde de cinco proyectos aprobados por un monto de $ 600.000 durante el año 2003, pasamos a 36 proyectos aprobados por un monto de $ 12.800.000 durante el año 2004.
En turismo, hemos intensificado la campaña de promoción de la provincia, sentando presencia en los medios nacionales y cartelería en Buenos Aires, y participando en la Feria Internacional del Turismo realizada en el Predio Ferial de Palermo.
En Turismo, hemos intensificado la campaña de promoción de la Provincia sentando presencia en los medios nacionales y la cartelería en Buenos Aires y participando en la Feria Internacional del turismo realizada en el predio ferial de Palermo.
También durante el 2004 hemos ejecutado, conjuntamente con la Asociación Argentina de Marketing y con financiamiento del Consejo Federal de Inversiones –que agradezco a su Presidente que está con nosotros acá-, un estudio de cambio de la imagen turística de San Juan, y posicionamiento como destino turístico, en consonancia con los tiempos de la Nación para la construcción de la marca País.
Una clara señal de la importancia que le asignamos al turismo, está en el incremento presupuestario para el presente periodo, y regresando a la participación regional a través del Ente Nuevo Cuyo, el cual la Provincia presidirá desde Abril por un año.
La configuración de la ruta del vino, recientemente delineada, el desarrollo de productos específicos como el turismo rural, el turismo cultural, el de aventura, entre otros, son objetivos de acrecentamiento durante este año.
La cartilla turística escolar, recientemente confeccionada, será incluida como contenido transversal en el ciclo lectivo 2005.
La licitación por la concesión de los Hoteles en poder de la provincia generará, y de hecho lo está haciendo, un ambiente de inversiones necesario sin el cual, no hay crecimiento posible.
He firmado el decreto que constituye el CONSEJO CONSULTIVO DE TURISMO, donde Gobierno, Universidades, Privados, y toda O.N.G. representativa del sector, que quiera realizar su aporte constructivo, tendrá su lugar.
Convoco a los Sanjuaninos, como estamos haciendo con muchos temas más, a identificar los puntos de encuentro y crecimiento, dejando de lado las diferencias, y a trabajar por el San Juan que soñaron nuestros padres.
En el área minera, estamos convencidos de haber interpretado el lugar que tenía y tiene San Juan en el concierto nacional y mundial.
La construcción de Veladero, con una inversión de 450 millones de dólares, está generando trabajo genuino para miles de personas en San Juan. Ello, ha transformado...
...Ello ha transformado la actividad económica, desde la construcción hasta la provisión de alimentos, pasando por los insumos y servicios más variados, creando verdaderas oportunidades de participación y desarrollo.
Y este desafío, que recién comienza, ya está preanunciando la aparición en escena de Lama-Pascua, de mayor envergadura aún, con características inéditas, pues se trata del primer proyecto binacional del mundo, y con una inversión cercana a 1.500 millones de dólares.
La infatigable labor de control ejercida por la Policía Minera, a la que hemos dotado de personal y nuevas movilidades, la puesta en marcha del Consejo Consultivo Minero, y el correcto funcionamiento del CIPCAMI (Centro de Investigación para la Prevención de la Contaminación Ambiental Minero Industrial), nos garantizan que se cumplirán estrictamente con la normativa que rige la materia, en especial, la relacionada con el respeto y la preservación del entorno ambiental.
La minería y el medio ambiente, tienen el mismo nivel de importancia en la agenda de mi Gobierno.
Señores legisladores: por muchos años nues-tra provincia pareció olvidada de la mano de Dios, sumergida en una siesta eterna a la sombra de decenas de monumentos al “no se puede”, al “no me interesa”, al “no me importa”.
Si bien es verdad que durante años en esta provincia todos sabíamos lo que debía hacerse y todos éramos testigos de lo que no se hacía, también es verdad que hace 500 días los sanjuaninos nos eligieron para reconstruir a San Juan por segunda vez, y éste compromiso asumido, hoy estoy dispuesto a cumplirlo cabalmente.
Para ello, este gobierno provincial tomó como suyo el proyecto del presidente Kirchner de un país dinámico, competitivo, que gradualmente irá trans-formando los planes sociales en planes productivos donde se le devuelva a la gente lo que le corresponde por derecho: un trabajo digno con un salario digno.
Un país donde los trabajadores, los empresarios y el Estado se sienten a la misma mesa para compartir esfuerzos, ideas y proyectos. Un país donde entre todos reconstruyamos el capital nacional, porque sabemos que el pan ganado con el trabajo alimenta el estómago tanto como alimenta el alma.
Un país, en definitiva, que va a encontrar a los sanjuaninos con mucho qué decir al respecto. Tenemos un proyecto explicitado. Tenemos un camino, que no es otro que el recorrido durante estos quince meses de gobierno. Y tenemos claridad meridiana sobre cuáles son los pilares que cimentan el crecimiento provincial:
- el desarrollo de San Juan como la primera provincia minera del país;- el fortalecimiento competitivo del complejo agro-industrial;- el aprovechamiento integral de nuestros recursos turísticos;- y la integración con Chile en todos los aspectos estratégicos posibles.
Quiero aprovechar la presencia en este recinto de nuestros hermanos chilenos para agradecer-les su participación en este acto tan significativo, y para reiterarles la absoluta convicción de mi gobierno respecto a seguir manteniendo e incluso acelerar el ritmo de la tarea conjunta que estamos llevando a cabo.
Señor Presidente, Señores Legisladores;
Para finalizar: a lo largo del año 2004, le hicimos frente a los fantasmas de la desesperanza y hemos estado viendo despertar otra provincia, que no ha superado sus problemas, que todavía sigue pagando enormes costos especialmente en los sectores más desamparados, que todavía no ha vencido la batalla contra los especuladores y oportunistas de adentro y de afuera.
Pero que está mostrando avances, que está cumpliendo etapas y que no renunciará a seguir dando esta pelea a brazo partido, con dignidad, con coraje y con ideas.
Hace unos días, cuando recorrimos a lomo de mula la ruta del glorioso Ejército de los Andes, supimos en carne propia que sólo las convicciones más profundas y las voluntades más nobles pueden alimentar la decisión de seguir adelante.
Y no es palabrerío hueco: hay que andar esas huellas casi invisibles que trepan al borde de abismos insondables, donde el viento frío corta el aliento, para dimensionar la magnitud de la gesta sanmartiniana y la clase de ejemplo que significa para todos los argentinos de hoy.
Bajo el auspicio de esa memorable epopeya, quiero hoy agradecer a esta Honorable Cámara y a cada uno de los aquí presentes, su entrega a la trascendental labor de discutir y enriquecer las ideas y proyectos que nos van a permitir avanzar por la ruta trazada. Una ruta en la que –no me cansaré de repetirlo- todos somos compañeros de viaje. Ni los adversarios son los enemigos, ni los amigos son los dueños de la verdad.
Hace exactamente un año atrás terminé mi discurso con tres palabras que hoy quiero reiterar, porque cobran más fuerza y más decisión que nunca: todos juntos podemos.
Esa es la llave que nos va a permitir reconstruir el orgullo de ser sanjuanino, porque ésa es la llave que abre las puertas del San Juan que todos queremos.
El San Juan de la buena voluntad, del trabajo mancomunado, del respeto a la inteligencia y a la diversidad. El San Juan que no se queda en las pequeñeces, la frustración y la politiquería. El San Juan grande, porque es el San Juan de las ideas que se realizan.
Por ese San Juan sigamos trabajando juntos.
Muchas gracias.
JOSE LUIS GIOJA
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