DISCURSO EN SAN
RAFAEL, PROVINCIA DE MENDOZA
Néstor Kirchner
[29 de Agosto de
2006]
Señor gobernador de la provincia Mendoza,
querido amigo Julio Cobo; señor Intendente Municipal de San Rafael, querido
amigo Omar Felix; señores ministros del Poder Ejecutivo Nacional; autoridades
nacionales; señores legisladores; senadores nacionales y diputados nacionales
que tanto ayudan a la gobernabilidad del país; hermanos representantes de los
Derechos Humanos:
Un profundo honor compartir con ustedes el recordatorio, el palco y el honor, aquellas vidas sesgadas por el horror; y a San Rafael, en primer lugar pedirle disculpas porque no pude llegar la vez pasada, pero acá estoy cumpliendo la palabra empeñada, estoy abrazado con el pueblo de San Rafael, Mendoza, y les quiero agradecer profundamente a los miles y miles de sanrafaelinos que aquí en la calle me han recibido con una bondad eterna, con un cariño y un afecto que hicieron llorar a este pingüino, como me dicen algunos, me hicieron llorar acá los sanrafaelinos en el día de hoy.
Un profundo honor compartir con ustedes el recordatorio, el palco y el honor, aquellas vidas sesgadas por el horror; y a San Rafael, en primer lugar pedirle disculpas porque no pude llegar la vez pasada, pero acá estoy cumpliendo la palabra empeñada, estoy abrazado con el pueblo de San Rafael, Mendoza, y les quiero agradecer profundamente a los miles y miles de sanrafaelinos que aquí en la calle me han recibido con una bondad eterna, con un cariño y un afecto que hicieron llorar a este pingüino, como me dicen algunos, me hicieron llorar acá los sanrafaelinos en el día de hoy.
Ese cariño, esa esperanza y esa
responsabilidad que sentimos, que siempre le comento a Cristina. Sentimos que
tenemos que hacer una etapa donde haya un punto de inflexión histórica donde
podamos ser generosos y grandes, donde podamos entender que el país es todo,
que el país merece una construcción federal, que podamos entender que el
sectarismo, las viejas divisiones que castraron la posibilidad de que los
argentinos podamos hacer una patria para todos, definitivamente vayan quedando
en el olvido de ese mal pasado que nunca debimos tener. Para eso, los que más
responsabilidad tenemos somos los que más tenemos que dar, los que más tenemos
que entregar desde el punto de vista intelectual, espiritual y de las
realizaciones.
Por eso me planto, y le agradezco al señor
Gobernador y al señor Intendente, para decirle al país entero que no va a haber
ofensa, no va a haber agravio, que me corte las ansias de construir una
Argentina que sintetice a todas las fuerzas del campo nacional que quieran
hacer una patria con justicia y equidad.
No serán los agravios de los fantasmas del
pasado, como aquellos que no quieren entender, que creen que la política
solamente es agresión o descalificación. Yo no tengo la culpa de que aquellos
que tenían la responsabilidad de gobernar el país en algunos casos se hayan ido
antes, en otros casos hayan llenado de pobreza al país, en otros casos nos
hayan avergonzado con la corrupción, en otros casos que hayan hecho pactos de
Olivos vergonzantes a espaldas del pueblo argentino. Yo no tengo la culpa, ni
el Gobernador ni el Intendente.
Qué lindo que hubiera sido -con su permiso
querido Gobernador- que en la
Convención un sector de su partido en vez de agredir y
agraviar a los que no piensan igual que ellos, hubiera hecho la autocrítica de la Argentina del
“corralito”, la Argentina
del hambre, la Argentina
que llevaron a la desocupación, de la Argentina que la llevaron al olvido.
Qué lindo que hubiera sido que le hubieran
pedido perdón al pueblo argentino por lo que pasó en la plaza el 20 de
diciembre. También lo veo en aquellos que desde mi propio partido quieren
seguir reivindicando teorías que nada tienen que ver con la Argentina que queremos
construir. No queremos más para la
Argentina proyectos neoliberales, ni queremos más proyectos
de injusticia que marginen a los jubilados, a los pobres, a las clases medias,
a la industria nacional, a los empresarios nacionales, ese proyecto de la
década del ´90 que nos llenó de dolor a todos los argentinos.
Tampoco a aquellos, -fíjense ustedes cómo
coordinan- sacando la ley de Obediencia Debida y Punto Final para generar la
impunidad que hoy estamos pagando y otros para sacar indultos. No importa de
dónde venían pero tenían el mismo sentido de la impunidad. Queremos una
Argentina de justicia, memoria, acción, dinamismo, donde todos se sientan parte
de este país que queremos construir.
Por eso con el gobernador de Mendoza, el
Intendente y los intendentes de todas las localidades mendocinas y de todo el
país no hacemos toma y daca, no, nos está preocupando y este Presidente lo que
trata de hacer es escuchar a los legítimos representantes del pueblo mendocino
para tratar de hacer las obras que Mendoza necesita y no imponer un capricho
centralista del Gobierno Nacional sino aplicar las políticas federales que
nuestra patria necesita.
Yo digo con la mano en el corazón por qué no
tienden la mano, por qué no ayudan, como les pido todos los días y el pueblo lo
hace, el pueblo argentino sin divisiones lo hace, a los lugares en que voy y
cuando les pido ayuda, como hoy les pido a los mendocinos que me ayuden:
¡ayúdenme a gobernar mejor, ayúdenme a equivocarme menos, ayúdenme a ser mejor,
ayúdenme a responder mejor, ayúdenme a solucionar las cosas mejor, ayúdenme a
ser un buen cristiano al servicio de todos los argentinos para poder hacer la Patria que nosotros
necesitamos!
Queridos hermanos de San Rafael, nadie es
perfecto, cometemos errores permanentemente, pero también es importante que la
fuerza moral de nuestro pueblo vaya llenando las avenidas de la Patria. No puede ser
que sigamos viviendo de viejas prácticas políticas y dirigenciales, que sigamos
viviendo con necesidades y acciones de pequeños grupos que nada tienen que ver
con la Argentina. Por
eso el grito que debe inundar la
Patria es un grito de trabajo conjunto en la pluralidad, de
trabajo conjunto en la diversidad, con una sola bandera, la bandera de la Argentina , y con un solo
himno, el Himno Nacional y con un sólo escudo, el escudo de la Patria ; con un solo
objetivo, la felicidad de nuestro pueblo; con un gran deseo, terminar con las
injusticias que fueron sufriendo nuestros desocupados, nuestros indigentes,
nuestros empresarios nacionales, nuestros industriales y nuestros jubilados. A
ellos les puedo hablar mirándolos a los ojos, hoy algunos hablan de lo que hay
que aumentar o no a los jubilados cuando los tuvieron 14 años -de los dos
partidos mayoritarios- en la heladera, olvidados como si no fueran seres
humanos. Nosotros, desde que llegamos, estuvimos al lado de nuestros viejos,
como corresponde y lo vamos a seguir haciendo como corresponde, trabajando
junto a ellos, sin demagogia, sin mentiras, sin promesas, con acciones.
Por eso estoy feliz, estoy muy contento de
estar acá, en una tierra de productores, en una tierra de labradores, de trabajadores,
que enorgullece a la
Argentina , venimos a cumplir con una obra que es un derecho y
un acuerdo que hacemos con el Gobierno de Mendoza. Esta obra, que es una
inversión millonaria, es una obra que permanentemente el señor Gobernador de
Mendoza, sus intendentes, sus legisladores nacionales la pidieron, la firmamos,
espero que el Gobernador la licite, que la obra se pueda empezar el año que
viene y que demos una vuelta histórica y que esta generación le pueda decir a
las generaciones que vienen que estuvimos a la altura de la historia. Venimos a
cumplir esta palabra federal con el pueblo de Mendoza.
Queridos amigos, les digo a todos los
argentinos desde aquí, claro que todavía estamos en el infierno, claro que nos
tocó tomar un país con asignaturas pendientes, claro que hay muchos problemas
por resolver, eso lo sabemos y lo tenemos con claridad y lo vamos a seguir
haciendo con toda humildad. Y vamos a caminar por este rumbo, vamos a seguir
abriendo los brazos, vamos a seguir concertando, vamos a seguir juntándonos y
uniéndonos en ideas y en acciones con todos los argentinos. Nosotros tenemos
que tratar de, por lo menos, tomar algunas ideas de nuestros grandes próceres:
de San Martín, de Belgrano y de Mariano Moreno, que fundaron esta patria y
están esperando que nosotros seamos una generación que esté a la altura de los
que ellos quisieron sembrar, es algo que tenemos que hacer queridos argentinos.
Por eso me quiero despedir de todos ustedes
con un gimnasio que levante la voz fuerte gritando Argentina, que es la
consigna que nos va a unir, gritando Mendoza que es la consigna que nos va a
unir a todos los mendocinos, porque me siento parte de esta provincia, y
amando, queriendo y gritando San Rafael, tierra de productores y de trabajo que
va a tener el apoyo de este Gobierno nacional permanentemente.
Muchísimas gracias Mendoza, muchas gracias
por todo vuestro esfuerzo, acá tienen un servidor, acá tienen a un sureño que
pone su corazón junto a ustedes, muchas gracias.
NESTOR KIRCHNER
No hay comentarios:
Publicar un comentario